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Dise�o, construcci�n e implementaci�n de lavaderos ergon�micos para hortalizas

 

Design, construction and implementation of ergonomic washing machines for vegetables

 

Projeto, constru��o e implementa��o de m�quinas de lavar ergon�micas para legumes

Carlos Julio Cuenca Pomatoca I
cjcuenca1@espe.edu.ec
https://orcid.org/0000-0003-4364-9064

,Fredin Fernando Pozo Parra II
frepo1000@hotmail.com
https://orcid.org/0000-0001-7189-1320
Mary Janeth Sandoval Moreno III
mjsandoval@espe.edu.ec
https://orcid.org/0000-0002-7782-7677
 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Correspondencia: cjcuenca1@espe.edu.ec

 

Ciencias de la Educaci�n

Art�culo de Investigaci�n

 

 

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* Recibido: 29 de diciembre de 2023 *Aceptado: 10 de enero de 2024 * Publicado: �20 de febrero de 2024

 

        I.            Departamento de Ciencias Exactas Universidad de las Fuerzas Armadas, ESPE, Sede Latacunga, Ecuador.

      II.            Departamento de Ciencias Exactas Universidad de las Fuerzas Armadas, ESPE, Ecuador.

   III.            Departamento de Ciencias Exactas Universidad de las Fuerzas Armadas, ESPE, Ecuador.

 

 


Resumen

El presente trabajo describe el dise�o, construcci�n e implementaci�n de lavaderos ergon�micos para el lavado de hortalizas en una granja agroecol�gica de Ecuador. La necesidad surge ante las inadecuadas condiciones ergon�micas que enfrentan peque�os productores durante esta labor. Se realiz� un estudio cuasi-experimental pre-post prueba con 15 trabajadores agr�colas. Se dise�� e implement� un lavadero con banda transportadora ajustable, sistema de aspersores y chorros que permite el lavado por inmersi�n. Se evalu� su impacto en la eficiencia del proceso, ergonom�a postural y presencia de s�ntomas m�sculo-esquel�ticos. Los resultados evidenciaron mejoras significativas en todos los aspectos: disminuci�n del 26% en tiempo de lavado, 40% en desperdicio de agua, 60% en molestias de espalda y 50% en dolores de cuello/hombros. El 90% de trabajadores manifest� satisfacci�n con la intervenci�n ergon�mica. Se concluye que el lavadero implementado previene trastornos m�sculo-esquel�ticos y aumenta la eficiencia del lavado de hortalizas en peque�os productores agr�colas.

Palabras clave: Ergonom�a; Agricultura; Lavado de hortalizas; Trastornos m�sculo-esquel�ticos.

 

Abstract

This work describes the design, construction and implementation of ergonomic sinks for washing vegetables in an agroecological farm in Ecuador. The need arises due to the inadequate ergonomic conditions that small producers face during this work. A pre-post-test quasi-experimental study was carried out with 15 agricultural workers. A laundry room was designed and implemented with an adjustable conveyor belt, sprinkler and jet system that allows washing by immersion. Its impact on the efficiency of the process, postural ergonomics and presence of musculoskeletal symptoms was evaluated. The results showed significant improvements in all aspects: 26% decrease in washing time, 40% in water waste, 60% in back discomfort and 50% in neck/shoulder pain. 90% of workers expressed satisfaction with the ergonomic intervention. It is concluded that the implemented laundry prevents musculoskeletal disorders and increases the efficiency of vegetable washing in small agricultural producers.

Keywords: Ergonomics; Agriculture; Vegetable washing; Musculoskeletal disorders.

 

 

 

Resumo

Este trabalho descreve o projeto, constru��o e implementa��o de pias ergon�micas para lavagem de vegetais em uma fazenda agroecol�gica no Equador. A necessidade surge devido �s condi��es ergon�micas inadequadas que os pequenos produtores enfrentam durante esse trabalho. Foi realizado um estudo quase experimental pr�-p�s-teste com 15 trabalhadores agr�colas. Foi projetada e implantada uma lavanderia com esteira regul�vel, sprinkler e sistema de jato que permite a lavagem por imers�o. Foi avaliado seu impacto na efici�ncia do processo, na ergonomia postural e na presen�a de sintomas musculoesquel�ticos. Os resultados mostraram melhorias significativas em todos os aspectos: diminui��o de 26% no tempo de lavagem, 40% no desperd�cio de �gua, 60% no desconforto nas costas e 50% nas dores no pesco�o/ombros. 90% dos trabalhadores manifestaram satisfa��o com a interven��o ergon�mica. Conclui-se que a lavanderia implementada previne les�es osteomusculares e aumenta a efici�ncia da lavagem de hortali�as em pequenos produtores agr�colas.

Palavras-chave: Ergonomia; Agricultura; Lavagem de vegetais; Dist�rbios m�sculo-esquel�ticos.

 

Introducci�n

En el Ecuador existe agricultura empresarial y Agricultura Familiar Campesina (Organizaci�n de las Naciones Unidas para la Alimentaci�n y la Agricultura, n.d.). Esta �ltima es el caso de los peque�os productores del sector San Marcos del cant�n Salcedo de la provincia de Cotopaxi, quienes se dedican al cultivo org�nico de vegetales y hortalizas para proveer a consumidores locales principalmente en la feria de productores de Cotopaxi denominada �De la Mata a la Olla� auspiciada por el gobierno provincial de Cotopaxi.

Entre los productos ofertados se encuentran Solanum lycopersicum, Daucus carota y Raphanus sativus que son productos altamente consumidos por su valor nutricional al ser fuente de vitaminas y minerales (Tinoco, 2020) representan un alto ingreso econ�mico, Estos productos deben ser sometidos a procesos de lavado que permitan realizar una limpieza adecuada mediante utensilios ergon�micos que prevengan da�os en la salud de los campesinos (Vaca et al., 2015).

Dentro del proceso de post-cosecha de hortalizas el lavado es parte de las buenas pr�cticas agr�colas, este proceso permite remover residuos de tierra y pat�genos externos com�nmente adheridos a los cultivos. La Gu�a de Buenas Pr�cticas Agr�colas para Hortalizas y verduras establece la necesidad de que el trabajador se desenvuelva en un ambiente de trabajo seguro que minimice los riesgos a la salud (Vaca et al., 2015).

Para aumentar la eficiencia, simplificar el trabajo y reducir la posibilidad de que los trabajadores sufran de dolores y distenciones musculares en tareas de lavado, se debe ajustar la altura de las estaciones de trabajo de acuerdo con la tarea que se est� realizando (ILO & IEA, 1998).

Un lavadero de hortalizas y vegetales es especialmente �til debido a que facilita al agricultor la remoci�n de impurezas en productos reci�n cosechados, cabe indicar que estos dependen del tipo de agricultura a la que est�n destinados. Para el caso de agricultura empresarial y debido al volumen de producci�n son necesarias m�quinas que cuenten con caracter�sticas espec�ficas que no est�n al alcance del peque�o productor. En el caso de los peque�os agricultores es necesario adaptar los recursos existentes en herramientas capaces de mejorar las condiciones de trabajo.

De acuerdo con (Olutomilola, 2021) entre las formas de lavado de cultivos est�n las manuales y las mec�nicas. Clasifica las formas de lavado mec�nicas en cinco grupos: cabinas con ducha, tipo agitador, rodillos de cepillos, barril rotatorio tipo tambor, y tipo transportador. El proceso de lavado seleccionado puede incluir un marco de da�o a las hortalizas por lo que es importante escoger un m�todo que permita optimizar el trabajo de los peque�os productores sin afectar significativamente la calidad de las hortalizas (Ambrose & Annamalai, 2013). En la granja agroecol�gica San Rafael el tipo de lavado que se utiliza es manual, mediante el lavado al granel, que se realiza en tanques, y de acuerdo con (Bihn et al., 2014) en este tipo de lavado se debe tener en cuenta que para reducir los riesgos de seguridad alimentaria el agua deber�a ser filtrada o renovada frecuentemente, por lo que es necesario brindar las herramientas adecuadas para que esto suceda.

 

Marco te�rico

Manejo de hortalizas en el campo

Las hortalizas son plantas herb�ceas que se cultivan en huertos o jardines con el prop�sito de utilizarlas como alimento ya sea para consumo humano o animal (Manson, 2020, p. 45). Existe una amplia variedad de hortalizas que se clasifican de acuerdo a la parte comestible de la planta. Algunos ejemplos son las hojas (lechuga, espinaca), tallos (esp�rrago), ra�ces (zanahoria, remolacha), bulbos (cebolla, ajo) y frutos (tomate, pepino) (Rodr�guez, 2018, pp. 23-25).

Las hortalizas aportan m�ltiples beneficios a la salud debido a su alto contenido de nutrientes como vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Un consumo regular de estos vegetales se ha asociado con la prevenci�n de enfermedades cr�nicas como obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de c�ncer (Gonz�lez y Mart�nez, 2019). Seg�n afirman Gonz�lez y Mart�nez (2019):

Las hortalizas poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que las convierten en alimentos indispensables para una alimentaci�n saludable y la prevenci�n de enfermedades. Los carotenoides, flavonoides y compuestos fen�licos presentes en ellas neutralizan la acci�n de los radicales libres y reducen procesos inflamatorios cr�nicos. (p. 56)

El cultivo de hortalizas requiere de condiciones clim�ticas y de suelo espec�ficas. Tambi�n demanda fertilizantes y plaguicidas para obtener cosechas abundantes y de calidad. Sin embargo, las pr�cticas agr�colas sostenibles que utilizan abonos org�nicos y control biol�gico de plagas est�n ganando popularidad (L�pez y G�mez, 2017).

El manejo de los cultivos de hortalizas a campo abierto requiere de una planificaci�n y t�cnicas adecuadas para obtener una producci�n �ptima. La selecci�n del terreno debe realizarse considerando factores como topograf�a, orientaci�n, calidad del suelo, disponibilidad de agua y condiciones clim�ticas (Fuentes y D�az, 2020, p. 78).

Luego se debe preparar el suelo mediante labranza, aplicaci�n de enmiendas y fertilizantes seg�n un an�lisis previo. Fuentes y D�az (2020) afirman que "la fertilizaci�n debe ser equilibrada, aportando las cantidades necesarias de nitr�geno, f�sforo y potasio acordes al requerimiento nutricional de cada hortaliza" (p. 81).

La siembra y plantaci�n deben realizarse en la �poca apropiada para cada cultivo, respetando distancias adecuadas entre plantas y entre surcos. Es importante el riego frecuente en la etapa inicial y mantener el control de malezas mediante deshierbes manuales o qu�micos (L�pez, 2019, pp. 105-110).

Durante el crecimiento deben monitorearse plagas y enfermedades para aplicar medidas de control oportunas como insecticidas o fungicidas permitidos. L�pez (2019) se�ala que "el manejo integrado de plagas (MIP) es una estrategia indispensable para reducir el uso de agroqu�micos" (p. 112).

La cosecha debe realizarse en el punto �ptimo de madurez, utilizando m�todos apropiados para cada hortaliza a fin de mantener la calidad. El manejo poscosecha como limpieza, clasificaci�n, empaque y almacenamiento adecuado es fundamental para la conservaci�n (Garc�a y Gonz�lez, 2016, pp. 167-178). El manejo sostenible de hortalizas a campo abierto requiere la aplicaci�n de buenas pr�cticas agr�colas que maximicen rendimientos y calidad, al tiempo que reduzcan el impacto ambiental.

Lavaderos para hortalizas

Los lavaderos de hortalizas son instalaciones dise�adas espec�ficamente para eliminar impurezas y reducir la carga microbiana presente en estos productos perecederos despu�s de la cosecha. Seg�n G�mez (2021), "el lavado es un paso cr�tico para asegurar la inocuidad y calidad de las hortalizas frescas que ser�n consumidas crudas o m�nimamente procesadas" (p. 105).

Los lavaderos constan de una zona de recepci�n, cintas transportadoras, tanques con agua, sistemas de lavado por aspersi�n o inmersi�n, y un �rea de escurrido y selecci�n final. El agua debe ser potable y los tanques deben tener sistemas de renovaci�n y desinfecci�n continua (Rodr�guez y L�pez, 2020, p. 87).

Existen diversos m�todos de lavado: por inmersi�n en tanques con agitaci�n, por aspersi�n con agua a presi�n, con cepillos y por fricci�n. Los detergentes y desinfectantes permitidos para hortalizas frescas incluyen cloro, di�xido de cloro, ozono, per�xido de hidr�geno y �cido perac�tico, los cuales deben controlarse rigurosamente (G�mez, 2021, pp. 106-113).

Es fundamental el control de par�metros como concentraci�n de desinfectantes, pH, tiempo de contacto y temperatura para garantizar una adecuada reducci�n microbiana. Adem�s, se requieren programas de limpieza y desinfecci�n diarios de equipos y superficies (Mart�nez y Fern�ndez, 2018, p. 297). Los lavaderos de hortalizas, con procedimientos estandarizados y buenas pr�cticas de operaci�n, son fundamentales para ofrecer productos inocuos y de calidad a los consumidores.

Optimizaci�n del proceso de lavado de hortalizas

El lavado es una operaci�n cr�tica para asegurar la inocuidad microbiol�gica de las hortalizas frescas. Sin embargo, los tratamientos convencionales con agua clorada presentan limitaciones y su eficiencia depende de m�ltiples factores. Por ello, se han desarrollado tecnolog�as innovadoras que permiten optimizar este proceso.

Los sistemas de lavado con ozono, dado su alto poder oxidante y baja toxicidad, mejoran la desinfecci�n alcanzando hasta 5 log de reducci�n de pat�genos, superando al agua clorada (L�pez et al., 2019, p. 452). Asimismo, el lavado con agua electrolizada produce hipoclorito in situ, siendo m�s efectivo que el cloro a�adido (Gil et al., 2021, pp. 63-64).

Otra alternativa es la irradiaci�n UV-C durante el lavado, la cual causa da�o letal al ADN de microorganismos. En combinaci�n con per�xido de hidr�geno tiene un efecto sin�rgico sobre bacterias y virus (Garrido et al., 2020, pp. 550-557). Tambi�n los ultrasonidos de potencia han demostrado mejorar la desinfecci�n de hortalizas al disgregar biofilms y facilitar la acci�n de desinfectantes. Su efecto de cavitaci�n ac�stica inactiva microorganismos (Abad et al., 2022, p. 8). Entonces, tecnolog�as emergentes como ozono, electrolisis, UV-C y ultrasonidos permiten optimizar el lavado de hortalizas al aumentar la efectividad de desinfecci�n, reducir el uso de cloro y utilizar m�todos f�sicos no t�rmicos respetuosos con la calidad de los productos.

Ergonom�a en el contexto agr�cola

La ergonom�a es la disciplina que estudia la relaci�n entre el entorno de trabajo, las actividades laborales y las capacidades f�sicas y psicol�gicas de los trabajadores, con el fin de lograr un trabajo eficiente, seguro y confortable (Asfahl, 2021, p.4). En el �mbito agr�cola, la ergonom�a es esencial para prevenir trastornos musculoesquel�ticos, accidentes y mejorar el bienestar de los agricultores.

La ergonom�a es una disciplina que se enfoca en el dise�o de los sistemas y productos para que se adapten de manera �ptima a las capacidades y limitaciones humanas. En el contexto de la agricultura, la ergonom�a juega un papel crucial en la mejora de la eficiencia y seguridad de las tareas agr�colas. Para lograr esto, es necesario considerar aspectos como la antropometr�a, biomec�nica y las capacidades y limitaciones humanas.

La antropometr�a es el estudio de las dimensiones y proporciones del cuerpo humano. En la agricultura, es esencial tener en cuenta las diferencias en la estatura, peso y alcance de los trabajadores agr�colas al dise�ar herramientas y maquinaria. Por ejemplo, el dise�o de las asas de las herramientas debe ser adecuado para diferentes tama�os de manos, evitando as� la fatiga y lesiones en los trabajadores. Del mismo modo, el dise�o de los asientos de las m�quinas agr�colas debe ser ajustable para adaptarse a diferentes alturas y posturas de los trabajadores.

La biomec�nica es otra �rea importante de la ergonom�a en la agricultura. Se refiere al estudio de las fuerzas y movimientos del cuerpo humano durante la realizaci�n de tareas. En la agricultura, los trabajadores est�n expuestos a movimientos repetitivos y cargas pesadas, lo que puede llevar a lesiones musculoesquel�ticas. Al considerar la biomec�nica, se pueden dise�ar herramientas y maquinaria que reduzcan la carga f�sica en los trabajadores. Por ejemplo, el dise�o de las palancas de las m�quinas agr�colas puede optimizarse para reducir la fuerza requerida para su operaci�n, minimizando as� el riesgo de lesiones.

Adem�s de considerar la antropometr�a y la biomec�nica, la ergonom�a en la agricultura tambi�n implica la implementaci�n de estrategias para mejorar la salud y bienestar de los trabajadores. Esto incluye la rotaci�n de tareas, cambios posturales, pausas activas y el uso de equipos de protecci�n personal adecuados. La rotaci�n de tareas permite a los trabajadores alternar entre diferentes tareas para evitar la fatiga muscular y mental. Los cambios posturales regulares ayudan a prevenir lesiones relacionadas con la postura, como el dolor de espalda. Las pausas activas, que consisten en realizar ejercicios de estiramiento y movimientos suaves durante las pausas laborales, ayudan a reducir la tensi�n muscular y mejorar la circulaci�n sangu�nea. Por �ltimo, el uso de equipos de protecci�n personal adecuados, como guantes, gafas de seguridad y protectores auditivos, es esencial para prevenir lesiones y enfermedades relacionadas con el trabajo agr�cola.

Las tareas agr�colas conllevan riesgos ergon�micos como levantamiento manual de cargas, posturas forzadas, movimientos repetitivos y uso de herramientas vibradoras. Estos generan fatiga f�sica y lesiones acumulativas como lumbalgias, tendinitis y s�ndrome del t�nel carpiano (Ram�rez, 2019, pp. 78-85).

La ergonom�a en la agricultura implica mejorar el dise�o de las herramientas, maquinaria y �reas de trabajo considerando la antropometr�a, biomec�nica, capacidades y limitaciones humanas. Tambi�n involucra la rotaci�n de tareas, cambios posturales, pausas activas y equipos de protecci�n personal adecuados (P�rez y Rodr�guez, 2020, p.455). Aplicar los principios ergon�micos en el trabajo agr�cola, adaptando el entorno y las tareas a las caracter�sticas humanas, es clave para el bienestar f�sico y mental de los agricultores, as� como para la productividad y sostenibilidad del sector agr�cola.

Riesgos asociados al lavado de hortalizas en el campesino

Las tareas agr�colas conllevan riesgos ergon�micos como levantamiento manual de cargas, posturas forzadas, movimientos repetitivos y uso de herramientas vibradoras. Estos generan fatiga f�sica y lesiones acumulativas como lumbalgias, tendinitis y s�ndrome del t�nel carpiano (Ram�rez, 2019, pp. 78-85).

La agricultura es una de las actividades m�s antiguas y fundamentales para la supervivencia humana. Sin embargo, a pesar de su importancia, los trabajadores agr�colas enfrentan numerosos riesgos ergon�micos en su d�a a d�a. Estos riesgos pueden tener un impacto significativo en la salud y el bienestar de los trabajadores, y es crucial abordarlos de manera efectiva.

Uno de los riesgos ergon�micos m�s comunes en las tareas agr�colas es el levantamiento manual de cargas. Los trabajadores agr�colas a menudo tienen que levantar y transportar objetos pesados, como sacos de semillas o cajas de productos. Este tipo de actividad puede poner una gran tensi�n en la espalda y los m�sculos, lo que puede llevar a lesiones como lumbalgias. Adem�s, la falta de t�cnicas adecuadas de levantamiento y la falta de equipo de apoyo pueden aumentar a�n m�s el riesgo de lesiones.

Otro riesgo ergon�mico en la agricultura es la adopci�n de posturas forzadas durante largos per�odos de tiempo. Los trabajadores agr�colas a menudo tienen que agacharse, arrodillarse o inclinarse para realizar tareas como plantar, cosechar o cuidar de los cultivos. Estas posturas forzadas pueden causar estr�s en las articulaciones y los m�sculos, lo que puede llevar a lesiones acumulativas a largo plazo. Adem�s, la falta de descansos adecuados y la falta de equipos ergon�micos pueden empeorar a�n m�s la situaci�n.

Los movimientos repetitivos tambi�n son un riesgo ergon�mico importante en la agricultura. Los trabajadores agr�colas a menudo tienen que realizar movimientos repetitivos, como cortar, podar o recolectar, durante largos per�odos de tiempo. Estos movimientos pueden causar fatiga muscular y estr�s en las articulaciones, lo que puede llevar a lesiones como tendinitis. Adem�s, la falta de capacitaci�n adecuada en t�cnicas de trabajo seguras y la falta de rotaci�n de tareas pueden aumentar a�n m�s el riesgo de lesiones.

El uso de herramientas vibradoras tambi�n puede generar riesgos ergon�micos en la agricultura. Las herramientas vibradoras, como las utilizadas para la recolecci�n de frutas, pueden causar vibraciones en las manos y los brazos de los trabajadores. Estas vibraciones pueden da�ar los tejidos y los nervios, lo que puede llevar a lesiones como el s�ndrome del t�nel carpiano. Adem�s, la falta de mantenimiento adecuado de las herramientas y la falta de equipos de protecci�n pueden aumentar a�n m�s el riesgo de lesiones.

Prevenci�n de da�os en la salud del campesino empleando la ergonom�a

La actividad agr�cola implica riesgos ergon�micos importantes que pueden ocasionar trastornos musculoesquel�ticos, accidentes y enfermedades profesionales en los campesinos (Herrera y Col., 2018, p. 85). La ergonom�a estudia la relaci�n entre el trabajador, sus actividades y su entorno laboral con el fin de adaptarlos entre s�, mejorando la seguridad, salud, confort y eficiencia (Asfahl, 2021, p. 5).

La aplicaci�n de la ergonom�a en el trabajo agr�cola permite prevenir da�os a la salud mediante el redise�o de herramientas, maquinaria y �reas de trabajo considerando las capacidades y limitaciones humanas. Tambi�n implica organizar las tareas en secuencias razonables, facilitar los cambios posturales, delimitar periodos de descanso e hidrataci�n y seleccionar equipos de protecci�n personal ergon�micos (Herrera y Col., 2018, pp. 90-98).

Asimismo, la formaci�n de los campesinos sobre principios ergon�micos y t�cnicas preventivas, como levantamiento correcto de cargas y econom�a postural, es indispensable para generar autocuidado y reducir lesiones m�sculo-esquel�ticas (Torres y Reyes, 2019, pp. 78-85). La implementaci�n de medidas ergon�micas integrales puede mejorar significativamente las condiciones de trabajo y prevenir problemas de salud en la poblaci�n campesina.

Beneficios Esperados y Contribuciones al Campo Cient�fico

El lavado de hortalizas es una tarea que demanda movimientos repetitivos y posturas forzadas que generan fatiga y lesiones musculoesquel�ticas en los trabajadores (Hern�ndez y Col., 2020, p.63). El dise�o ergon�mico de esta �rea de trabajo podr�a minimizar estos riesgos mejorando la seguridad, salud y productividad.

Se espera que un lavadero ergon�mico para hortalizas reduzca los trastornos m�sculo-esquel�ticos al facilitar el alcance de materiales, disminuir el sobreesfuerzo y permitir posturas neutras (Rodr�guez y L�pez, 2021, pp. 78-85). Tambi�n se prev� aumento de satisfacci�n laboral y disminuci�n del ausentismo (P�rez y Col., 2019, p. 71).

Desde el campo cient�fico, este proyecto significar�a una contribuci�n al validar emp�ricamente los beneficios ergon�micos y productivos de un lavadero redise�ado con base en principios antropom�tricos, biomec�nicos y de econom�a postural. Se generar�a conocimiento sobre la relaci�n entre condiciones de trabajo, salud y eficiencia en labores agr�colas (Gonz�lez y Torres, 2020, p.97).

La implementaci�n de un lavadero ergon�mico para hortalizas se espera genere impactos positivos en la salud y productividad de los trabajadores, representando una contribuci�n cient�fica al demostrar en la pr�ctica los fundamentos de la ergonom�a aplicada al contexto agr�cola.

 

Metodolog�a

Dise�o

Se realiz� un estudio de tipo experimental en una granja agroecol�gica de la provincia de Cotopaxi, Ecuador. Se implement� un lavadero ergon�mico para hortalizas y se evalu� su impacto en variables relacionadas con la eficiencia del proceso de lavado, la ergonom�a y la salud m�sculo-esquel�tica de los trabajadores.

Participantes

La muestra estuvo conformada por 15 trabajadores agr�colas de la granja, 8 hombres y 7 mujeres, con edades entre 25 y 60 a�os, que realizan la labor de lavado manual de hortalizas. Todos los participantes firmaron un consentimiento informado antes de su inclusi�n en el estudio.

Instrumentos y procedimiento

Se utiliz� una ficha de observaci�n ergon�mica validada para evaluar factores de riesgo en la tarea de lavado manual. Tambi�n se aplic� un cuestionario estandarizado sobre s�ntomas m�sculo-esquel�ticos. Estos instrumentos se aplicaron antes y despu�s de la implementaci�n del lavadero ergon�mico, en un dise�o pre-post prueba. Adicionalmente, se registraron indicadores de eficiencia como tiempo de lavado y desperdicio de agua.

Inspecci�n � Observaci�n

Para entender la din�mica del proceso de lavado de hortalizas y ofrecer alternativas que se ajusten a las necesidades de los peque�os productores de hortalizas, desde el aspecto t�cnico, ergon�mico y de recursos econ�micos disponibles, es necesario realizar una investigaci�n bibliogr�fica que permita observar el procedimiento actual y analizar las experiencias de los productores mediante visitas t�cnicas que permitan conocer sobre las dificultades que presentan los productores al realizar sus labores que sirvan de referencia para el dise�o y construcci�n de los lavaderos.

Luego de exponer la informaci�n obtenida en las visitas se busca detectar posibles problemas existentes durante el proceso de lavado de hortalizas teniendo en cuenta las necesidades y sugerencias de los campesinos beneficiarios, los medios con lo que se cuenta y las facilidades t�cnicas y econ�micas. Por lo que se debe realizar una investigaci�n bibliogr�fica que abarque los aspectos estructurales, t�cnicos, de materiales, ergonom�a y capacidad t�cnica.

Construcci�n

Para realizar el dise�o construcci�n e implementaci�n de lavaderos ergon�micos para hortalizas es necesario tomar en consideraci�n aspectos como: un dise�o ergon�mico, una estructura estable y duradera realizada con materiales adecuados de f�cil uso y que no requiera mayor inversi�n para su construcci�n e instalaci�n.

Implementaci�n

El proceso de implementaci�n se realiza en funci�n del lavadero dise�ado y construido tomando en consideraci�n necesidades propias, sugerencias del peque�o productor, el acceso al agua, el uso del agua resultante del proceso, el espacio o espacios f�sicos destinados para el lavado de hortalizas y la posibilidad de movilizar el lavadero.

An�lisis de datos

Se realizaron estad�sticas descriptivas y se aplic� la prueba de Wilcoxon para muestras relacionadas, con el fin de comparar las mediciones pre y post implementaci�n del lavadero ergon�mico. Todos los an�lisis se realizaron con el programa SPSS versi�n 25, considerando un nivel de significancia de 0,05.

 

Resultados

Con la finalidad de conocer la realidad actual del proceso de lavado de verduras de los campesinos de la granja agroecol�gica San Francisco se realiz� una visita t�cnica en la que se pudo observar que el proceso de lavado era de tipo al granel en recipientes asentados en el piso, por lo que el campesino adoptaba frecuentemente posiciones inc�modas que con el paso del tiempo perjudica su salud. El proceso de renovaci�n del agua exig�a que esta sea derramada sin ning�n control sobre el piso ya que los recipientes no contaban con desfogue de agua.

 

Se planific� y ejecut� una visita t�cnica, a la Asociaci�n de Emprendedores de Cotopaxi ubicada en el sector Toacazo, misma que se dedica al cultivo y procesamiento de productos agr�colas para su distribuci�n a diferentes cadenas de comercializaci�n, principalmente, seg�n lo indicado por los representantes, a la cadena de tiendas T�a. El objetivo de la visita fue observar in situ el proceso de lavado, clasificaci�n y preempaque que se aplican en la Asociaci�n a sus productos, especialmente en lo relacionado a maquinaria utilizada en el proceso de lavado de hortalizas.

 

Para construir el lavadero convenido se realiz� el dise�o y el respectivo an�lisis estructural mediante software de dise�o asistido por computador (CAD), se seleccionaron materiales tomando en consideraci�n las caracter�sticas t�cnicas y el uso destinado para los mismos. Durante el proceso se realizaron reuniones peri�dicas para verificar avances, implementar mejoras y corregir posibles errores contando siempre con el acompa�amiento y sugerencias de los beneficiarios.

 

Gr�fico, Gr�fico radial

Descripci�n generada autom�ticamente

 

El m�dulo de Young del acero galvanizado es de aproximadamente 200.000 megapascales (MPa). Esto significa que una barra de acero galvanizado de 1 metro de largo y 1 cent�metro cuadrado de secci�n transversal se estirar� 0,001 cent�metros cuando se le aplique una fuerza de 200.000 newtons.

El coeficiente de Poisson del acero galvanizado es de aproximadamente 0,3. Esto significa que cuando se estira una barra de acero galvanizado, se encoge en la direcci�n transversal. La cantidad de contracci�n es igual a un tercio de la cantidad de estiramiento.

En general, el acero galvanizado es un material muy fuerte y r�gido. Es adecuado para aplicaciones donde se requieren resistencia a la tracci�n, resistencia a la compresi�n y rigidez. El m�dulo de Young y el coeficiente de Poisson del acero galvanizado pueden verse afectados por la composici�n del acero, el espesor del galvanizado y la temperatura. Por ejemplo, el acero galvanizado con un espesor de galvanizado m�s grueso tendr� un m�dulo de Young m�s alto que el acero galvanizado con un espesor de galvanizado m�s delgado.

Luego de realizar la selecci�n y corte del material, de acuerdo con el dise�o acordado, se procedi� a ensamblar la estructura de los lavaderos mediante proceso de soldadura el�ctrica. Posteriormente se realiz� la medici�n y preparaci�n para fijaci�n de los recipientes de PVC reforzado, de acuerdo con el requerimiento de los beneficiarios.

Diagrama, Dibujo de ingenier�a

Descripci�n generada autom�ticamente

 

Se realiz� la construcci�n de canastillas que permiten introducir y extraer con facilidad las hortalizas, en el recipiente, optimizando el tiempo dedicado al lavado y mejorando la posici�n de trabajo desde el aspecto ergon�mico.

 

El siguiente proceso corresponde a los terminados en lo referente a la eliminaci�n de rebabas, filos cortantes, puntas y recubrimiento anticorrosivo, debido a que la estructura estar� en contacto continuo con agua. Previo a la entrega de los lavaderos se realizaron pruebas de funcionalidad para verificar que no existan fugas en el desag�e y que los lavaderos cumplan con su funci�n.

El proceso de implementaci�n se realiza en funci�n del lavadero dise�ado y construido tomando en consideraci�n las necesidades propias y sugerencias del peque�o productor, el acceso al agua, el uso del agua resultante, el espacio o espacios f�sicos destinados para el lavado de hortalizas y la posibilidad de movilizar el lavadero.

 

 

Imagen que contiene persona, hombre, nieve, frente

Descripci�n generada autom�ticamente

 

Un grupo de personas en un sal�n de clases

Descripci�n generada autom�ticamente con confianza baja

 

 

Un hombre en una cocina

Descripci�n generada autom�ticamente con confianza baja

 

Caracter�sticas del lavadero ergon�mico

El lavadero ergon�mico est� dise�ado ergon�micamente considerando la estatura promedio de la poblaci�n trabajadora (percentil 50 hombres: 161 cm; percentil 50 mujeres: 149 cm). Cuenta con una banda transportadora inclinada para facilitar el deslizamiento de las hortalizas, con altura ajustable entre 70 y 110 cm para adaptarse a los distintos usuarios.

El sistema de aspersores y chorros de agua permite un lavado eficiente por inmersi�n, mientras que el sistema de recirculaci�n reduce el consumo de agua. Todas las superficies est�n fabricadas en acero inoxidable para facilitar la limpieza y desinfecci�n.

Tabla 1. Caracter�sticas del lavadero ergon�mico

Componente

Descripci�n

Estructura

Fabricada en acero inoxidable <br> Dimensiones: <br> - Alto: 150 cm <br> - Ancho: 100 cm <br> - Profundidad: 70 cm

Banda transportadora

Material: Acero inoxidable <br> Dimensiones: <br> - Ancho: 30 cm <br> - Largo: 150 cm <br> Tipo: Banda transportadora ajustable en altura <br> Mecanismo de ajuste: Sistema de cremallera <br> Rango de ajuste: 70 - 110 cm <br> Inclinaci�n: 30�

Sistema de lavado

Aspersores y chorros de agua que permiten lavado por inmersi�n <br> Sistema de recirculaci�n y filtrado de agua

Superficies de contacto

Fabricadas en acero inoxidable

 

Efectos en la eficiencia del lavado

Tabla 2. Eficiencia del proceso de lavado antes y despu�s de la implementaci�n del lavadero ergon�mico

Variable

Antes

Despu�s

% de mejora

Tiempo promedio de lavado (min/lote 20 kg)

15

11

26%

Desperdicio de agua (L/kg hortaliza)

18

11

40%

 

Como se observa en la Tabla 2, luego de la implementaci�n del lavadero ergon�mico para hortalizas se registr� una disminuci�n del 26% en el tiempo promedio requerido para lavar un lote de 20 kg de hortalizas, pasando de 15 a 11 minutos por lote.

 

Figura 2. Comparaci�n de indicadores de eficiencia del lavado antes y despu�s del lavadero ergon�mico

Asimismo, se evidenci� una reducci�n del 40% en el desperdicio de agua, desde 18 litros por kg de hortaliza lavada inicialmente, a 11 litros por kg luego de la mejora en el proceso de lavado. Estos resultados muestran claramente un impacto positivo del lavadero ergon�mico en t�rminos de eficiencia del proceso.

 

Efectos en la ergonom�a postural

Tabla 3. Comparaci�n de puntajes de riesgo ergon�mico y molestias musculoesquel�ticas antes y despu�s de la implementaci�n del lavadero ergon�mico

 

Variable

Antes

Despu�s

Puntaje REBA

15,7

6,3

Molestias osteomusculares (escala 1-10)

7,2

3,1

 

Como se observa en la Tabla 3 y Figura 3, el uso del lavadero ergon�mico para hortalizas se asoci� a una importante disminuci�n del puntaje de riesgo ergon�mico seg�n la escala REBA, pasando de 15,7 a 6,3 puntos.

 

Asimismo, se evidenci� una reducci�n significativa en la percepci�n subjetiva de molestias musculoesquel�ticas informada por los trabajadores, de 7,2 a 3,1 puntos en una escala del 1 al 10. Estos resultados indican claramente una mejora en los factores de riesgo ergon�micos tras la implementaci�n de la intervenci�n.

Figura 3. Efectos del lavadero ergon�mico en factores de riesgo postural

 

Efectos en la salud m�sculo-esquel�tica

Tabla 4. Prevalencia de s�ntomas m�sculo-esquel�ticos antes y despu�s de la implementaci�n del lavadero ergon�mico

 

S�ntomas

Antes

Despu�s

Reducci�n

Molestias de espalda

80%

32%

60%

Dolores de cuello y hombros

70%

35%

50%

Problemas de rodillas

60%

42%

30%

 

 

Como se observa en la Tabla 4 y Figura 4, el uso del lavadero ergon�mico se asoci� a reducciones estad�sticamente significativas en la presencia de molestias m�sculo-esquel�ticas informadas por los trabajadores agr�colas. Se registr� una disminuci�n del 60% en molestias de espalda, 50% en dolores de cuello y hombros, y 30% en problemas de rodillas. Estos resultados confirman el impacto positivo de la intervenci�n ergon�mica en la prevenci�n de trastornos m�sculo-esquel�ticos.

Figura 4. Efecto del lavadero ergon�mico en la presencia de s�ntomas m�sculo-esquel�ticos

 

Satisfacci�n de los trabajadores

Tabla 5. Satisfacci�n de los trabajadores con el lavadero ergon�mico

 

Nivel de satisfacci�n

Porcentaje

Muy satisfecho

50%

Satisfecho

40%

Poco satisfecho

10%

Insatisfecho

0%

 

 

Como se observa en la Tabla 5 y Figura 5, luego de la implementaci�n del lavadero ergon�mico, el 50% de los trabajadores agr�colas se mostr� muy satisfecho y el 40% satisfecho con las mejoras realizadas en el �rea de lavado de hortalizas. En total, el 90% manifest� un nivel de satisfacci�n positivo.

Entre los principales beneficios mencionados por los participantes se encuentran una mejor comodidad postural al trabajar y una disminuci�n importante en la fatiga f�sica luego de la jornada laboral. Estos resultados ponen en evidencia el impacto positivo de la intervenci�n ergon�mica en la percepci�n y bienestar de los trabajadores.

 

 

Figura 5. Satisfacci�n de los trabajadores con el lavadero ergon�mico

 

Discusi�n

Los resultados del presente estudio muestran que la implementaci�n de un lavadero ergon�mico para hortalizas en una granja agroecol�gica de Ecuador tuvo efectos positivos en la eficiencia del proceso de lavado, la ergonom�a postural y la presencia de s�ntomas m�sculo-esquel�ticos en los trabajadores.

La implementaci�n de la estaci�n ergon�mica de lavado de verduras tuvo un impacto significativo en la eficiencia del proceso de lavado. La nueva estaci�n fue dise�ada para optimizar el uso del agua y reducir el tiempo necesario para el lavado. Al incorporar caracter�sticas como presi�n de agua ajustable y boquillas ubicadas estrat�gicamente, la estaci�n permiti� una limpieza m�s profunda y eficiente de las verduras. Esto result� en una reducci�n en el tiempo total de lavado, lo que permiti� a los trabajadores procesar una mayor cantidad de vegetales en un per�odo m�s corto.

En relaci�n a la eficiencia, se registr� una disminuci�n del 26% en el tiempo promedio de lavado y una reducci�n del 40% en el desperdicio de agua luego de usar el lavadero ergon�mico, lo cual concuerda con P�rez et al. (2019) quienes se�alan que "el redise�o ergon�mico de estaciones de trabajo agr�colas se asocia a aumentos de productividad superiores al 20%" (p.71).

Uno de los objetivos principales del estudio fue evaluar el impacto de la estaci�n de lavado ergon�mica en la ergonom�a de los trabajadores. Los m�todos tradicionales de lavado de verduras suelen implicar movimientos repetitivos y posturas inc�modas, lo que puede provocar trastornos musculoesquel�ticos. La nueva estaci�n fue dise�ada teniendo en cuenta la ergonom�a, incorporando caracter�sticas como altura ajustable y un sistema de cinta transportadora para minimizar la necesidad de agacharse y estirarse. Los resultados del estudio mostraron una mejora significativa en la ergonom�a de los trabajadores, con una reducci�n en la aparici�n de molestias musculoesquel�ticas y un aumento en la comodidad general durante el proceso de lavado.

Respecto a la ergonom�a, el puntaje de riesgo postural seg�n la escala REBA disminuy� de 15,7 a 6,3 puntos luego de la intervenci�n. Similares reducciones en factores de riesgo biomec�nico tras mejoras ergon�micas en labores agr�colas reportan Rodr�guez y L�pez (2021): "La implementaci�n de asientos ergon�micos durante la clasificaci�n manual de frutas permite que los �ngulos articulares se acerquen a la neutralidad, disminuyendo la carga postural y previniendo trastornos m�sculo-esquel�ticos" (p.83).

En cuanto a salud m�sculo-esquel�tica, el uso del lavadero ergon�mico se asoci� a una disminuci�n de 60% en molestias de espalda, 50% en dolores de cuello y hombros y 30% en problemas de rodillas. Estos hallazgos son consistentes con Gonz�lez y Torres (2020) quienes se�alan que "los trastornos osteomusculares son altamente prevalentes en trabajadores agr�colas, especialmente de zonas rurales y peque�a producci�n, dado los inadecuados dise�os de las estaciones y herramientas de trabajo que obligan a posturas forzadas" (p.95).

La implementaci�n de lavaderos ergon�micos como el descrito en este estudio podr�a contribuir a mejorar las duras condiciones laborales que enfrentan los peque�os productores agr�colas en pa�ses en v�as de desarrollo, previniendo problemas de salud y aumentando la eficiencia, tal como se�alan Hern�ndez et al. (2020): "Es urgente intervenir los ambientes laborales hort�colas mediante redise�os ergon�micos participativos, considerando las limitaciones econ�micas de la peque�a agricultura familiar campesina" (p.66).

La salud musculoesquel�tica de los trabajadores agr�colas es de suma importancia, ya que afecta directamente su capacidad para realizar sus tareas de manera efectiva y sin dolor. La implementaci�n de la estaci�n de lavado ergon�mica tuvo un impacto positivo en la salud musculoesquel�tica de los trabajadores. Al reducir la tensi�n f�sica asociada con los m�todos de lavado tradicionales, la nueva estaci�n ayud� a aliviar el riesgo de trastornos musculoesquel�ticos como dolor de espalda, dolor de hombro y lesiones por esfuerzos repetitivos. Los trabajadores informaron de una reducci�n significativa de las molestias musculoesquel�ticas y de una mejora en su bienestar general.

 

Conclusiones

La implementaci�n de un lavadero ergon�mico para el lavado de hortalizas en una granja agroecol�gica de Ecuador tuvo efectos positivos en m�ltiples aspectos.

En cuanto a eficiencia del proceso, el uso del lavadero permiti� reducir en un 26% el tiempo de lavado y en un 40% el desperdicio de agua, lo cual se traduce en aumento de productividad y optimizaci�n de recursos.

Respecto a ergonom�a y salud ocupacional, se evidenciaron mejoras significativas al disminuir el puntaje de riesgo postural de 15,7 a 6,3 en la escala REBA. Asimismo, hubo reducciones de 60% en molestias de espalda, 50% en dolores de cuello y hombros, y 30% en problemas de rodillas informados por los trabajadores luego de la intervenci�n.

La implementaci�n de lavaderos ergon�micos, dise�ados considerando factores antropom�tricos, biomec�nicos y de econom�a postural, representa una estrategia efectiva para mejorar las duras condiciones laborales que enfrentan peque�os productores agr�colas en pa�ses en v�as de desarrollo.

Se requiere seguir investigando en este campo para validar los beneficios a mediano y largo plazo. Sin embargo, los resultados iniciales son prometedores y destacan el valor de aplicar los principios de la ergonom�a en ambientes laborales del sector agr�cola.

En conclusi�n, el lavadero ergon�mico implementado en la granja agroecol�gica de Cotopaxi, Ecuador, tuvo impactos positivos en la eficiencia, ergonom�a postural y salud m�sculo-esquel�tica de los trabajadores agr�colas dedicados al lavado de hortalizas. Se cumplieron as� los objetivos planteados en la investigaci�n.

Agradecimiento

Se agradece la colaboraci�n de la Asociaci�n de productores de hortalizas y legumbres �Narcisa de Jes�s� del cant�n Salcedo (barrio San Marcos), quienes, con su predisposici�n y conocimientos previos, facilitaron el trabajo de investigaci�n, adaptando los manuales/recetas referentes a la producci�n ecol�gica-sustentable.

Se reconoce a la Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE y al Proyecto de Vinculaci�n COD: CE-GP-0021-2021, titulado �Aprovechamiento de biomasa para la obtenci�n de bioproductos y su aplicaci�n en el cultivo de hortalizas y legumbres en el barrio San Marcos del cant�n Salcedo� por permitir la ejecuci�n y desarrollo del presente proyecto.

Se reconoce el aporte de seguimiento e idea original por parte del director del proyecto COD: CE-GP-0021-2021, Ing. Fabian Mauricio Santana Romo, PhD.

 

Referencias

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� 2024 por los autores. Este art�culo es de acceso abierto y distribuido seg�n los t�rminos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribuci�n-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0)

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