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Caracterizaci�n del aprendizaje basado en proyectos para el fortalecimiento de competencias emprendedoras

 

Characterization of project-based learning for the strengthening of entrepreneurial competencies

 

Caracteriza��o da aprendizagem baseada em projetos para o fortalecimento de compet�ncias empreendedoras

 

Cindy Liceth Nieto-Borbor ^I

cnieto0629@utm.edu.ec

https://orcid.org/0000-0002-2924-7408

 

Pedro Carlos Mart�nez-Su�rez ^II

pmartinezs@ucacue.edu.ec

https://orcid.org/0000-0002-1441-3821

 

 

����������� Correspondencia: cnieto0629@utm.edu.ec

 

Ciencias de la educaci�n �

Art�culo de revisi�n

 

*Recibido: 30 de enero de 2021 *Aceptado: 17 de febrero de 2021 * Publicado: 20 de marzo de 2021

 

        I.            Economista/ Estudiante del Programa de Maestr�a en Pedagog�a, Menci�n Docencia e Innovaci�n Educativa, Universidad T�cnica de Manab�, Portoviejo, Ecuador.

     II.            Doctor en Psicolog�a, Responsable del Laboratorio de Psicometr�a, Docente de� la� Universidad� Cat�lica� de� Cuenca, Cuenca, Ecuador.� �

Resumen

Por d�cadas, muchos pa�ses han implementado la educaci�n emprendedora, que, consiste en dotar al educando de una serie de capacidades y habilidades para hacer frente a las exigencias del mercado laboral actual. El sistema educativo se vio en la necesidad de abordar nuevas metodolog�as centradas en el estudiante y aplicar estrategias de acci�n que permitan a los educandos obtener competencias relevantes para su futuro personal y profesional. Por tal raz�n, el objetivo de este trabajo de investigaci�n, consisti� en la revisi�n, de las caracter�sticas que posee la metodolog�a del Aprendizaje Basado en Proyectos, para el fortalecimiento de competencias emprendedoras en la educaci�n formal. Por ello, fue necesario utilizar el m�todo de revisi�n sistem�tica mediante un proceso minucioso de b�squeda, clasificaci�n y an�lisis� de diversos constructos que sirvieron como referentes esenciales en este trabajo indagatorio. De esta manera, se obtuvieron resultados que, permitieron conocer a profundidad� los beneficios, limitaciones y estrategias para la implementaci�n de esta metodolog�a. Finalmente, los resultados encontrados permitieron realizar ciertas conclusiones que dan respuestas a las interrogantes planteadas.

Palabras claves: Aprendizaje basado en Proyectos; competencias emprendedoras; educaci�n en emprendimiento; estudiantes; docentes.

 

Abstract

For decades, many countries have implemented entrepreneurial education, which consists of providing the student with a series of capacities and abilities to face the demands of the current labor market. The educational system saw the need to address new student-centered methodologies and apply action strategies that allow students to obtain relevant skills for their personal and professional future. For this reason, the objective of this research work consisted of reviewing the characteristics of the Project-Based Learning methodology to strengthen entrepreneurial skills in formal education. For this reason, it was necessary to use the systematic review method through a meticulous search, classification and analysis process of various constructs that served as essential references in this investigative work. In this way, results were obtained that allowed to know in depth the benefits, limitations and strategies for the implementation of this methodology. Finally, the results found allowed making certain conclusions that provide answers to the questions posed.

Keywords: Project-based learning; entrepreneurial skills; entrepreneurship education; students; teachers.

 

Resumo

H� d�cadas, muitos pa�ses implantam a educa��o empreendedora, que consiste em dotar o aluno de uma s�rie de capacidades e habilidades para enfrentar as demandas do mercado de trabalho atual. O sistema educacional viu a necessidade de abordar novas metodologias centradas no aluno e aplicar estrat�gias de a��o que permitam aos alunos obter compet�ncias relevantes para o seu futuro pessoal e profissional. Por esse motivo, o objetivo deste trabalho de pesquisa consistiu em revisar as caracter�sticas da metodologia de Aprendizagem Baseada em Projetos para fortalecer as habilidades empreendedoras na educa��o formal. Por esse motivo, fez-se necess�ria a utiliza��o do m�todo de revis�o sistem�tica por meio de um meticuloso processo de busca, classifica��o e an�lise de diversos construtos que serviram como refer�ncias essenciais neste trabalho investigativo. Desta forma, foram obtidos resultados que permitiram conhecer em profundidade os benef�cios, limita��es e estrat�gias para a implementa��o desta metodologia. Por fim, os resultados encontrados permitiram tirar certas conclus�es que fornecem respostas �s quest�es colocadas.

Palavras-chave: Aprendizagem baseada em projetos; habilidades empreendedoras; educa��o para o empreendedorismo; aluno; professores.

 

Introducci�n

Los cambios continuos por los que atraviesa la sociedad actual, en lo que respecta a productividad, empleo, ciencia y tecnolog�a, han conllevado a que los sistemas educativos de muchos pa�ses, hagan uso de diversas estrategias que permitan obtener en los educandos habilidades y capacidades necesarias para hacer frente a esta versatilidad (G�mez, 2014; Suarez, 2011). Se hizo ineludible restructurar el curr�culo educativo y apuntar por la creaci�n de proyectos multidisciplinares que permitieran la consecuci�n de competencias transversales y espec�ficas de tipo instrumental, sistem�tico y personal; acordes a los nuevos desaf�os presentes en el mercado laboral (Espinoza et al. 2015; Villard�n, 2015). Fue necesario adem�s, la implementaci�n de actividades que lograran despertar en el educando una actitud emprendedora.

Por ello, uno de los organismos pioneros en prestar atenci�n al desarrollo de las competencias emprendedoras, fue La Uni�n Europea, que junto a sus pa�ses miembros, en su comunicaci�n a la Comisi�n al parlamento europeo y al comit� de las regiones, Eurydice (2016), estipul� se considere entre sus prioridades:

�Potenciar la oferta de aptitudes transversales que aumentan la empleabilidad, como la iniciativa emprendedora, las aptitudes digitales y los idiomas (...) Garantizando que se adopten medidas para integrar las aptitudes transversales en todos los planes de estudios, desde las fases tempranas de la educaci�n hasta la ense�anza superior, mediante enfoques pedag�gicos innovadores y centrados en los estudiantes; y dise�ar herramientas de evaluaci�n que permitan evaluar eficazmente los niveles de competencia. Ya que, todos los j�venes deben beneficiarse de una experiencia pr�ctica de emprendimiento como m�nimo antes de abandonar la ense�anza obligatoria� (p. 17).

Sum�ndose a este planteamiento, Rivera (2018) estableci� la importancia de potenciar las habilidades y capacidades de los educandos, mediante el uso de un aprendizaje que permita al estudiante interactuar y poner en pr�ctica lo aprendido. Por ello, expuso que:

Si se desea formar emprendedores, el proceso de aprendizaje debe ser dise�ado para maximizar los conocimientos, habilidades, actitudes y valores de los participantes, predisponerlos y prepararlos para la acci�n. Tienen que centrarse en la pr�ctica de comportamientos, en el desarrollo de habilidades y en el reforzamiento de los atributos asociados con ser una persona emprendedora. Por lo tanto, conviene superar el enfoque tradicional de la ense�anza: abandonar la idea de que debe seguir una secuencia de instrucci�n y control, y de que el aprendizaje ocurre en un sal�n de clases (p.11).

�En simetr�a a lo anterior, muchos pa�ses de Am�rica latina, y entre ellos Ecuador, optaron por incluir en su modelo pedag�gico, la puesta en marcha de proyectos escolares en la educaci�n primaria, una c�tedra de Emprendimiento en el bachillerato, y el fortalecimiento de las competencias en la Universidad. Inquirieron hacer un nexo entre educaci�n, productividad y empleabilidad; buscando desde los primeros a�os el desarrollo de los campos del saber, del saber-hacer y del saber-ser. (Ministerio de Educaci�n del Ecuador, 2015).

Desafortunadamente, no todo se ha cumplido a cabalidad, pues, los docentes en su mayor�a, no logran concretar la teor�a con la pr�ctica; bas�ndose, esencialmente a un aprendizaje te�rico con visi�n escolarizada. Esto, ha repercutido negativamente al desarrollo de las competencias, y entre ellas las emprendedoras; lo que debilita la creaci�n de proyectos, que pueden� convertirse en un referente de crecimiento y sostenibilidad econ�mica para el futuro del educando (Sep�lveda y Reina, 2016). La escaza formaci�n en metodolog�as que estimulen al educando a participar activamente, ha sido un referente limitante� en la consecuci�n de los objetivos que tienen estas inserciones.

Ante esta situaci�n, autores como Rodr�guez et al.,(2010) y Caballero et al., (2014) concuerdan que, una de las tantas metodolog�as activas que pueden utilizarse para la consecuci�n de competencias, es el Aprendizaje basado en proyectos (ABPr, desde aqu�), que se distingue, por permitir al educando realizar una serie de tareas, identificando su mercado, investigando una tem�tica, creando un plan y desarrollando una serie de procesos que lo llevan a la obtenci�n de un producto final, en un tiempo determinado. Asimismo, Pa�os (2017), Garc�a et al. (2017), Calleja et al. (2018) y Uriguen et al. (2018), consideran que, el Aprendizaje Basado en Proyectos permite promover la educaci�n en emprendimiento y la obtenci�n de competencias emprendedoras en diferentes lugares y modo. Pues, este modelo de aprendizaje no solo permite a los j�venes insertarse adecuadamente en los mercados laborales del siglo XXI; tambi�n les dota de herramientas y formas de pensar favorables para el fortalecimiento de la vocaci�n emprendedora (Acosta, 2018).

Con todo lo anteriormente expuesto, se hace oportuno, realizar un trabajo investigativo, que tiene por objetivo identificar las caracter�sticas que posee la metodolog�a del Aprendizaje Basado en Proyectos para el fortalecimiento de las competencias emprendedoras. Por ello, a continuaci�n se� realiza un abordaje y desarrollo argumentativo para dar respuestas a las siguientes interrogantes: �Qu� es el Aprendizaje basado en Proyectos?, �Cu�l es el rol de educando y del educador ante el proceso ABPr? �Cu�les son los pasos a seguir en el ABPr? �Qu� limitaciones tienen� los docentes al aplicar la Metodolog�a del ABPr? �Qu� experiencias internacionales evidencian la puesta en marcha de esta metodolog�a para el desarrollo de competencias emprendedoras?

 

Metodolog�a

Para llevar a cabo esta investigaci�n, se utiliz� una metodolog�a cualitativa de revisi�n bibliogr�fica documental, la misma, que permiti� llevar adelante la b�squeda, an�lisis, y sistematizaci�n, de constructos que aportan significativamente a la problem�tica en estudio. Se utilizaron diversas fuentes de investigaci�n, entre las que constan, art�culos cient�ficos, revistas, informes, entre otros. Adem�s, mediante la utilizaci�n del m�todo de an�lisis y s�ntesis se pudo identificar la caracterizaci�n del aprendizaje basado en proyectos.

Por ello, para la obtenci�n de informaci�n se hizo uso de las siguientes bases de datos:�

�         Scientific Electronic Library Online (SciELO),

�         Institute of Education Sciencies (ERIC),

�         Red de Revistas Cient�ficas de Am�rica Latina y el Caribe, Espa�a y Portugal (REDALYC),

�         Concejo Nacional de Ciencia, Tecnolog�a e innovaci�n Tecnol�gica (CONCYTEC)

�         DIALNET�

�         SCOPUS

Los descriptores de b�squeda, constituyeron un aspecto relevante y clave al momento de investigar, logrando relacionar conceptos y obtener informaci�n precisa que form� parte de este trabajo. As� pues, se manej� como criterios de b�squeda, palabras como: aprendizaje basado en proyectos y competencias emprendedoras. Adem�s, se hizo uso de sus nombres en ingl�s: �Project based learning�, �entrepreneurial skills�. Esto con el fin de obtener mayor informaci�n sobre nuestras variables determinadas.

No obstante, al realizar la b�squeda bibliogr�fica, se precis� considerar en mayor medida, estudios realizados desde el a�o 2010 hasta la actualidad. Fue as�, que se encontraron 97 estudios sobre Aprendizaje basado en proyectos y competencias en diferentes bases de datos, sin embargo, no todos fueron aceptados, dado que, no cumpl�an con los siguientes criterios de selecci�n:

�         Su publicaci�n en una revista cient�fica con revisi�n por pares

�         Tema relacionado con el objeto de estudio

�         Resultados confiables y ver�dicos para ser utilizados en el trabajo investigativo

Cabe mencionar que, estos criterios permitieron obtener diversidad en el contenido, lo que hizo fiable su interpretaci�n y validez para ser tomados como referencia en este trabajo. Adem�s, se hizo pertinente ocuparse de constructos que hicieran menci�n de manera notoria sobre las variables a estudiar.

 

 

 

Desarrollo y discusi�n

El aprendizaje basado en proyectos luce como una alternativa de formaci�n coherente con estas exigencias de los nuevos tiempos, porque permite acumular conocimientos y desarrollar habilidades para aprovechar al m�ximo las crecientes posiciones laborales, relacionadas con el manejo de proyectos (Acosta, 2018).� Esta estrategia tiene como prop�sito guiar de forma constructiva un desarrollo grupal del conocimiento, a trav�s de una interacci�n estructurada, orientada y formativa� (Fajardo y Gil, 2019). Es un modelo educativo que permite generar en el estudiante un proceso alcanzable de capacidades y habilidades; estimulando el pensamiento cr�tico, fortaleciendo el aprendizaje aut�nomo, e imbricando la necesidad por la investigaci�n, an�lisis y soluci�n de problemas (Aldana 2018). Hace que el estudiantado est� m�s motivado por su aprendizaje, sobre todo cuando estos proyectos son problemas reales de su contexto (Herrera 2017).

En esta metodolog�a, los estudiantes se pueden organizar por grupos y asimilar una asignatura mediante la realizaci�n de un proyecto. Estos proyectos se fundamentan en casos que se pueden encontrar en la vida diaria. As� pues, se permite al educando aproximarse al mundo real, aplicando los conceptos te�ricos desde un punto de vista pr�ctico (Mart� et al., 2007; Mart�n et al., 2019). No es una actividad adicional al aprendizaje, sino su fundamento. Procura que los educandos tengan mayor responsabilidad y se apropien de su aprendizaje; creciendo intelectualmente y encamin�ndolos a rescatar, comprender y aplicar lo que aprenden como una herramienta para resolver problemas y tareas (Flores y Ju�rez, 2017; Mujica, 2012).

Estudios como los de Toledo et al. (2018) y Reyes (1998), consideran que, el ABPr� conlleva a que los educandos realicen un proceso investigativo con el fin de dar respuestas a una pregunta, desaf�o o problema. Los discentes utilizan habilidades mentales relevantes� en lugar de retener datos en contextos aislados y sin conexi�n. Este proceso les permite integrar la teor�a con la pr�ctica y aplicar los conocimientos y habilidades para desarrollar una opci�n factible para su problema. As� pues, en este proceso el educando obtiene experiencias innovadoras y enriquecedoras para su aprendizaje, ya que, podr� planificar, investigar, analizar, implementar y evaluar planes reales, haciendo uso o no de las TIC. No se orienta solo en aprender acerca de algo, sino que, se direcciona a la acci�n, realizando un trabajo que solucione un problema en la pr�ctica (Mart�, Heydrich, Rojas, y Hern�ndez 2010). Por tal raz�n, la integraci�n del ABPr, conlleva a trabajar competencias espec�ficas y transversales en las diversas asignaturas en las que se implemente, preparando al estudiante para el futuro. (Fajardo al et, 2010; Dickinson, 1998; Huff, 2016). Para Imaz (2015):

Se trata de una metodolog�a muy apropiada para trabajar competencias. Ya que, el cambio social de las �ltimas d�cadas, ha llevado a un escenario donde cada vez es m�s evidente que adem�s de �aprender contenidos� es necesario �aprender a utilizarlos�, y en este sentido el Aprendizaje Basado en Proyectos es una metodolog�a dise�ada para el aprendizaje basado a partir de un trabajo de aplicaci�n pr�ctica real.

Para Mart�n et al., (2019) La aplicaci�n de esta metodolog�a demanda que el docente dise�e y construya un programa con actividades que deber�n ser realizadas por los estudiantes, dentro o fuera del sal�n de clases. El educador, se convierte en un orientador y facilitador del proceso de aprendizaje, influyendo y dirigiendo sus acciones hacia la interactividad, conexi�n, sincron�a y el reconocimiento del par en la negociaci�n grupal; dejando as� el protagonismo principal al estudiante (Fajardo y Gil 2019). Otro aspecto importante, que necesita tener en cuenta el docente, es la optimizaci�n de los ambientes de aprendizaje, mediante el uso de estrategias metacognitivas para conseguir resultados positivos (Fern�ndez 2017). Tambi�n, debe tener presente que al aplicar la estrategia de ABPr necesita desarrollar planes y proyectos bien� elaborados.

Por su parte el estudiante, tiene la posibilidad de trabajar de manera aut�noma y cooperativa para la adquisici�n de� sus propios conocimientos, se responsabiliza por sus acciones, planifica, investiga, analiza y genera acciones para solucionar alguna problem�tica del contexto. Al utilizar el ABPr, los estudiantes construyen, portafolios de aprendizaje, elaboran reportes y otros productos como evidencias del proceso y resultados alcanzados. Posteriormente efect�an la presentaci�n de su producto final� ante una asamblea, se autoeval�an, co-eval�an, reflexionan y mejoran (Rodr�guez et al., 2018). El objetivo de esta estrategia de ense�anza es que,� el educando aprenda haciendo. Se trata de aprender a afrontar el estilo de trabajo que necesitar� en su futura pr�ctica profesional (Imaz 2015). Por ello, al tratarse de una metodolog�a activa, el ABPr incide en el desarrollo de la motivaci�n de los alumnos y las alumnas (Botella y Ramos 2020).

Tambi�n, existen evidencias que determinan que, el uso del aprendizaje basado en proyectos, implican una mayor utilizaci�n del tiempo por parte de los estudiantes y profesores. Los educandos, deben planear, trabajar en grupo y desarrollar proyectos. Mientras que, el educador necesita preparar material id�neo para el modelo de ense�anza propuesto, tales como, proyectos, gu�as, ejercicios, tareas y rubricas� de evaluaci�n� (Herrera, 2017; Botella y Ramos, 2019). Esto conlleva a la gesti�n y utilizaci�n de mayor cantidad de tiempo para su planificaci�n, pues, debe ser muy h�bil con las actividades planteadas para evitar que el discente se descontextualice de los contenidos curriculares. El docente que se incentiva a trabajar con estas metodolog�as, tiene como tarea concluyente incentivar a los educandos, debido a que,� la forma de aprender se realizar� de manera diferente y los estudiantes no se encuentran acostumbrados, pues, al inicio es algo dif�cil de comprender (Gonz�lez et, 2016). Estas complejidades presentadas en torno a esta metodolog�a, pueden ser suprimidas si se considera un trabajo cooperativo entre todos los miembros que integran la comunidad educativa.

Por estas particularidades, se hace indispensable que, antes de iniciar un proyecto, se determine el tipo de proyecto que se va a utilizar. Maj� y Baquero (2014), consideran que dentro de la clasificaci�n de proyectos seg�n sus finalidades se encuentran: Aquellos que buscan dar respuesta o soluci�n a una situaci�n determinada o un problema; aquellos que Investigan o eval�an un problema, un asunto concreto o un tema complejo; y los que dise�an, elaboran o construyen un producto. Adem�s, se requiere que, a la hora de iniciar un proyecto, se tenga en cuenta las siguientes interrogantes que ser�n relevantes para identificar el fin del mismo: �Qui�n elige el tema del proyecto?, �Cu�nto va a durar? �Qu� recursos van a ser necesarios? �Qu� nivel de autonom�a tendr�n los alumnos? �Cu�ntas disciplinas contempla y cu�ntos docentes participar�n? �C�mo se agrupar�n los alumnos? �Qu� grado de trabajo en equipo y trabajo individual tendremos? �Qui�n elige el producto final? (UNICEF, 2020).

Por otro lado, es necesario, identificar los pasos a seguir en este proceso. De acuerdo a la literatura, existen diferentes formas, fases y procesos que se pueden llevar a cabo para trabajar con la metodolog�a del ABPr. Sin embargo, uno de los m�s accesibles y f�ciles de seguir, los presenta la iniciativa PLANEA de UNICEF (2020), que estipula seis pasos necesarios para ense�ar, aprender y promover el bienestar de estudiantes y docentes en la escuela; bas�ndose en una educaci�n inclusiva y de calidad que forme a los adolescentes en saberes y habilidades cr�ticas para su vida en el Siglo XXI. Aqu�, se muestran a continuaci�n:

1.      Presentaci�n del desaf�o.- En esta fase se presenta el proyecto a los alumnos. El desaf�o se les puede plantear como un pedido de alguna instituci�n, de la escuela misma (�necesitamos redise�ar el patio�) o de alguna organizaci�n del barrio o ciudad, y debe ser lo m�s aut�ntico y vinculado con el mundo real posible. Habr� que pensar y planificar una presentaci�n atractiva y estimulante para los alumnos, que genere una motivaci�n inicial y mantenga su inter�s por el proyecto

2.      An�lisis de conocimientos previos y necesidades.- En esta fase se indagan los conocimientos que ya tiene el alumnado sobre el tema, y detectan posibles conflictos cognitivos. Se debe contemplar, en el dise�o del proyecto, una o dos actividades con este objetivo.

3.      Planificaci�n y organizaci�n.- Esta fase establece aquellas tareas que son �tiles para planificar el trabajo y trazar su organizaci�n. Esta etapa es fundamental para reforzar la idea de planificaci�n en la b�squeda de informaci�n. Las tareas de organizaci�n sirven para que el alumnado entienda la necesidad de preparar las acciones que deben realizarse para resolver con �xito las tareas complejas.

4.      B�squeda y s�ntesis de informaci�n.- En este momento del proceso, se empieza a investigar y construir nuevos conocimientos. Esta fase puede ser desde muy libre (los alumnos investigan y sintetizan informaci�n por su cuenta) hasta muy guiada (todas las actividades de investigaci�n son propuestas por los docentes y los alumnos las realizan a la misma vez), pudiendo situarse en medio de este espectro o combinando elementos. Los docentes van acompa�ando esta etapa dando explicaciones cuando son necesarias y ayudando a sistematizar lo aprendido

5.      Elaboraci�n del producto final.- En este momento, con los nuevos conocimientos ya adquiridos, el alumnado est� preparado para materializar su respuesta al desaf�o: la elaboraci�n de su producto final. Esta fase puede ser de larga o corta duraci�n, dependiendo del �nfasis que se le quiera dar al producto final y de las caracter�sticas del mismo. Idealmente, se busca que el proyecto se vaya construyendo paulatinamente a lo largo de las semanas de trabajo. El tiempo de elaboraci�n del producto final se debe tener en cuenta en la planificaci�n del proyecto, ya que es un proceso que suele llevar tiempo y es muy valioso que lo puedan elaborar en clase, con el apoyo de los docentes.

6.      Presentaci�n del producto final.- Esta fase los equipos presentan sus producciones a un p�blico que puede incluir a las familias, compa�eros, otros representantes de la comunidad, incluso instituciones externas a la escuela. Los alumnos exhiben su trabajo y responden a preguntas del p�blico. (UNICEF 2020)

Con las fases presentadas anteriormente, se puede establecer que el orden de este proceso, permitir� motivar a los estudiantes para que sean conscientes de la importancia que el profesorado otorga a esta metodolog�a. Se hace necesario que el profesional educativo, planifique de manera minuciosa e innovadora los trabajos que se van a cumplir, puesto que, solo as�� los estudiantes se sentir�n comprometidos por la b�squeda de conocimientos orientados a la acci�n. Por ello, las actividades realizadas en la asignatura deben constituir la evaluaci�n continua de la misma (S�nchez et al., 2016). Por otro lado, el educador debe analizar las fechas de entrega de las actividades, otorgando cierta flexibilidad, pero concretando sus etapas antes del inicio del proyecto (Markham et al., 2003)

Otro aspecto importante que debe ser mencionado en esta investigaci�n, es que al trabajar con esta metodolog�a los docentes eval�an mediante diversos criterios de valoraci�n que permitan identificar las habilidades que ha implementado el educando para� conseguir los objetivos (Sanmart� y M�rquez, 2017). En otras palabras, el educador eval�a las competencias, los procesos, el desarrollo y el desempe�o individual y grupal realizado para la adquisici�n de un producto final (Mujica 2012). No se utilizan pruebas escritas que valoren la retentiva y la memorizaci�n, sino, que se utilizan mecanismos de evaluaci�n alternativas para valorar c�mo se aprende y que se aprende durante el desarrollo del proyecto y qu� capacidades, habilidades y competencias se han adquirido. Algunas alternativas son: el uso de portafolios individuales preparados por cada alumno que incluyan sus contribuciones al trabajo final, la autoevaluaci�n, la evaluaci�n entre pares dentro del grupo, la evaluaci�n entre grupos o la asignaci�n de tareas concretas individualizadas dentro del grupo ( P�rez et al., 2008).

Existen ejemplos, de investigaciones internacionales, que evidencian resultados positivos de acuerdo al proceso que han seguido con esta metodolog�a en la aplicaci�n de sus programas instituciones. Adem�s, exteriorizan el fortalecimiento de emprendimientos innovadores y competencias� entre sus educandos. Entre ellos destacan:

Job Shadow, es un programa promovido por la fundaci�n Junior Achievement, que tiene por objeto ayudar a los estudiantes a tener una actitud emprendedora en su acercamiento al mundo del trabajo. IVP Lessons de Singapur, en la que profesores-mentores ense�an a los estudiantes competencias y estrategias para: Identificar y comprender un problema, generar y evaluar ideas, desarrollar y probar soluciones. Company Program, es tambi�n un programa de la Fundaci�n danesa para el emprendimiento, dirigido a �aprender haciendo� donde los estudiantes deben ser capaces de desarrollar, probar y obtener ideas innovadoras. Proyectos IVP de Singapur, consiste en el desarrollo de proyectos innovadores, donde durante la primera mitad del a�o los participantes trabajan en un proyecto que han seleccionado, Posteriormente, hay dos sesiones de media jornada para la presentaci�n, evaluaci�n y selecci�n de las mejores ideas de proyecto y se finaliza con una presentaci�n de todos los proyectos (Cavero y Ruiz 2017)

Lo anteriormente establecido, permite identificar que, diversos pa�ses han producido una diversificaci�n en programas destinados a direccionar y aumentar el esp�ritu emprendedor del educando, poniendo en marcha actividades que ayudan a realizar proyectos de innovaci�n que terminan con un producto establecido, retos planteados, b�squeda de soluciones, y programas que interrelacionan las TICs con� el esp�ritu emprendedor (Cavero y Ruiz 2017). Esto permite llevar a la reflexi�n, la importancia de la planificaci�n did�ctica que realiza el docente y las estrategias de ense�anza que maneja para la formaci�n de competencias emprendedoras, dando lugar a una educaci�n, de calidad, direccionada a la consecuci�n de aprendizajes significativos en los educandos, puesto que, relacionan la teor�a con la praxis.

Mart�nez y Carmona (2009), establecen que, las�� competencias�� emprendedoras� se direccionan a�� brindar�� autonom�a�� al individuo�� y ��orientarlo�� hacia�� la�� autorrealizaci�n. Asimismo, Sobrado y Fern�ndez (2010) agregan que, para lograr un esp�ritu emprendedor, se deben fortalecer las competencias desde el �mbito educativo, a trav�s de la utilizaci�n de metodolog�as� activas. Por tal raz�n, el ABPr, constituye un referente importante para fortalecer las dimensiones consideradas en las competencias emprendedoras, como son el ser, el saber conocer y el saber hacer, ya que, a medida que el educando va trabajando en su proyecto, se van reafirmando y fortaleciendo los componentes actitudinales, cognitivos y conductuales.

 

Conclusiones

La revisi�n te�rica realizada, permiti� exteriorizar las particularidades que posee el Aprendizaje Basado en Proyectos, pues, la identifica como una metodolog�a de ense�anza, que permite al estudiante adquirir competencias a medida que trabaja en la resoluci�n de un problema y la obtenci�n de un producto final. Tambi�n, demuestra que, esta metodolog�a requiere que se trabaje mediante estrategias did�cticas factibles y flexibles para acoplarse al ritmo formativo del educando, ya que lleva adelante una simetr�a de los contenidos te�ricos con la pr�ctica.

Con respecto a los roles que se establecen entre educando y educador, se evidenci� que, los estudiantes que trabajan mediante el proceso ABPr, adoptan autonom�a y responsabilidades, puesto que, procuran dar lo mejor de s�, para la consecuci�n de los objetivos. Se vuelven cooperativos y colaborativos en su grupo, aprenden a planificar, investigar, elaborar y ejecutar planes o proyectos de su inter�s. No obstante, el docente se caracteriza por ser un gu�a dispuesto a dar su contingente cuando el estudiante lo requiera.

Por otro lado, los constructos revisados, permitieron reconocer que una de las limitaciones que posee el docente a la hora de trabajar con la metodolog�a ABPr, es el aumento del tiempo para la planificaci�n, pues, el profesor requiere de mayor utilizaci�n de horas para la programaci�n de actividades factibles, novedosas e interesantes que se apropien del inter�s del educando.

Otro aspecto analizado en esta investigaci�n, fue la aplicaci�n de metodolog�as activas y proyectos emprendedores, para el desarrollo de competencias en el panorama internacional. Esto, permiti� identificar la importancia que otros pa�ses le han dado a la educaci�n emprendedora, ya que consideran que, el educando necesita adquirir competencias clave para hacer frente a los cambios constantes por los que atraviesa la sociedad actual. Se han encargado de implementar en sus programas formativos, actividades que enganchen al estudiante con el mundo empresarial.

Finalmente, considerando que, la formaci�n de individuos competentes y emprendedores es la clave para aportar significativamente al desarrollo econ�mico de la sociedad, se reflexiona que,� desde el contexto educativo es necesario el desarrollo de estrategias, y actividades que permitan el fortalecimiento de las competencias. Por ello, es conveniente la utilizaci�n de metodolog�as acordes a su direccionamiento. Entre las que destaca, el ABPr.

 

Referencias

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3.             Botella, A., y Ramos, P. (2020). Motivaci�n y Aprendizaje Basado en Proyectos: una Investigaci�n-Acci�n en Educaci�n Secundaria. Multidisciplinary Journal of Educational Research, 10(3), 295- 320. doi: 10.4471/remie.2020.4493. http://dx.doi.org/10.447/remie.2020.4493

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