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Terapia floral en el tratamiento de trastornos de ansiedad en adultos mayores

 

Floral therapy in the treatment of anxiety disorders in older adults

 

Terapia floral no tratamento de transtornos de ansiedade em adultos maiores

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: fcontero@istmas.edu.ec

 

 

Ciencias de la Salud

Art�culo de Investigaci�n

 

 

* Recibido: 30 de noviembre de 2023 *Aceptado: 11 de diciembre de 2023 * Publicado: �13 de enero de 2024

 

        I.            Instituto Superior Universitario Misael Acosta, Ecuador.

      II.            Instituto Superior Universitario Misael Acosta, Ecuador.

   III.            Instituto Superior Universitario Misael Acosta, Ecuador.

 

Resumen

Los trastornos de ansiedad constituyen un problema prevalente a nivel mundial, con una tendencia creciente a�o tras a�o. Su presencia en la poblaci�n de adultos mayores de 60 a�os representa una carga importante que deteriora la calidad de vida. Para su tratamiento, se prefiere el uso temprano de medidas no farmacol�gicas, como apoyo psicol�gico. Las terapias complementarias se muestran como importantes opciones para este fin, en especial la terapia floral, medicina vibracional que usa extractos provenientes de flores con efecto sobre el �mbito emocional. En este estudio se evalu� el impacto de la terapia floral dentro del programa de apoyo psicol�gico en pacientes adultos mayores con diagn�stico de trastorno de ansiedad en la unidad de funcionalidad ambulatoria del Hospital Geri�trico Dr. Bol�var Arguello P, Riobamba, Ecuador. La terapia floral fue aplicada en un grupo de 35 participantes a lo largo de tres meses, evaluando su efecto a trav�s de la escala de Goldberg para determinar el grado de depresi�n y ansiedad. Se obtuvo una reducci�n en la frecuencia de respuestas positivas en un 33,16 % y 14,34 % respectivamente, que fue significativo. Se sugiere el desarrollo de estudios posteriores para incorporar esta terapia complementaria en los servicios de salud mental.

Palabras clave: Ansiedad; Depresi�n; Terapia Floral; Flores de Bach; Adulto Mayor.

 

Abstract

Anxiety disorders are a prevalent problem worldwide, with a growing trend year after year. Its presence in the population of adults over 60 years of age represents a significant burden that deteriorates the quality of life. For its treatment, the early use of non-pharmacological measures, such as psychological support, is preferred. Complementary therapies are shown as important options for this purpose, especially floral therapy, vibrational medicine that uses extracts from flowers with an effect on the emotional sphere. In this study, the impact of flower therapy was evaluated within the psychological support program in older adult patients with a diagnosis of anxiety disorder in the outpatient functionality unit of the Dr. Bol�var Arguello P Geriatric Hospital, Riobamba, Ecuador. Flower therapy was applied to a group of 35 participants over three months, evaluating its effect through the Goldberg scale to determine the degree of depression and anxiety. A reduction in the frequency of positive responses was obtained by 33.16% and 14.34% respectively, which was significant. The development of subsequent studies is suggested to incorporate this complementary therapy in mental health services.

Keywords: Anxiety; Depression; Flower Therapy; Bach Flowers; Older Adult.

 

Resumo

Os transtornos de ansiedade s�o um problema prevalente em todo o mundo, com tend�ncia crescente ano ap�s ano. A sua presen�a na popula��o adulta com mais de 60 anos representa um fardo significativo que deteriora a qualidade de vida. Para o seu tratamento, prefere-se o uso precoce de medidas n�o farmacol�gicas, como o apoio psicol�gico. As terapias complementares mostram-se como op��es importantes para esse fim, com destaque para a terapia floral, medicina vibracional que utiliza extratos de flores com efeito na esfera emocional. Neste estudo, avaliou-se o impacto da terapia floral dentro do programa de apoio psicol�gico em pacientes idosos com diagn�stico de transtorno de ansiedade na unidade de funcionalidade ambulatorial do Hospital Geri�trico Dr. Bol�var Arguello P, Riobamba, Equador. A terapia floral foi aplicada a um grupo de 35 participantes durante tr�s meses, avaliando seu efeito atrav�s da escala de Goldberg para determinar o grau de depress�o e ansiedade. Obteve-se uma redu��o na frequ�ncia de respostas positivas de 33,16% e 14,34% respectivamente, o que foi significativo. Sugere-se o desenvolvimento de estudos subsequentes para incorporar esta terapia complementar nos servi�os de sa�de mental.

Palavras-chave: Ansiedade; Depress�o; Terapia Flora; Florais De Bach; Idoso.

 

Introducci�n

Los trastornos de ansiedad en el adulto mayor constituyen uno de los problemas m�s prevalentes e importantes, puesto que suponen un deterioro significativo de la calidad de vida. Se caracterizan por una serie de alteraciones cognitivas y som�ticas como intranquilidad, impaciencia, dificultad de concentraci�n, irritabilidad, tensi�n muscular, trastornos del sue�o, entre otros.�

De acuerdo a la Clasificaci�n Internacional de Enfermedades (CIE), los trastornos de ansiedad son un grupo de alteraciones cuyo s�ntoma cardinal es la presencia de angustia, sensaci�n subjetiva de peligro, malestar, tensi�n o aprensi�n, que se acompa�an por manifestaciones neurovegetativas y otros problemas, como depresi�n y trastornos del sue�o (Reyes Ticas, 2010).

En 2019, una de cada ocho personas en el mundo padec�a alg�n tipo de trastorno mental, siendo las m�s comunes ansiedad y depresi�n. Desde 2020, este n�mero aument� considerablemente debido a la pandemia de COVID 19, un 26% para ansiedad y un 28% para depresi�n en solo un a�o. Aunque existen opciones eficaces para su prevenci�n y tratamiento, la mayor�a de personas con estos problemas no tienen acceso a una atenci�n efectiva, adem�s que sufren de discriminaci�n, estigma y violaci�n de derechos humanos (Reyes Ticas, 2010). Datos actuales demuestran que estos trastornos han afectado a aproximadamente una de cada 3 personas en alg�n momento de su vida, relacion�ndose a 41,9% de las causas de discapacidad en mujeres y 29,3% en hombres, de modo que pueden ser comparables a la morbilidad por angina de pecho (Ministerio de Salud, 2020). En la regi�n de las Am�ricas, se estima que hasta el 7,7% de la poblaci�n femenina y 3,6% de los hombres presenta ansiedad como trastorno cr�nico (Pego-P�rez et al., 2018).

La Organizaci�n Mundial de la Salud (OMS) manifiesta que el aumento en la esperanza de vida es una tendencia a nivel mundial, incluso en pa�ses en desarrollo. Sin embargo, esto no significa un incremento en su calidad. M�s de un 20% de las personas que superan los 60 a�os sufren de alg�n tipo de trastorno mental, y el 6,6% de los motivos de discapacidad para este grupo etario se atribuye a trastornos neuropsiqui�tricos. Los trastornos de ansiedad afectan al 3,8% de la poblaci�n de mayor edad, y los problemas por abuso de sustancias psicotr�picas debido a esto alcanzan casi el 1%. Adem�s, aproximadamente una cuarta parte de causas de muerte por da�o auto infligido corresponde a personas mayores a 60 a�os (Alvarado Garc�a & Salazar Maya, 2014).

Para el tratamiento de la ansiedad, se cuenta actualmente con recursos farmacol�gicos y no farmacol�gicos, siendo los ansiol�ticos el principal grupo de f�rmacos que se usan con relativa eficacia, pero con un considerable riesgo de presentar efectos adversos y adicci�n. Las terapias no farmacol�gicas han ganado progresivamente terreno en los servicios de salud, y se basan en entrenar al paciente en el control de sus miedos y preocupaciones a trav�s de relajaci�n, razonamiento y distracci�n. En el adulto mayor, estas t�cnicas son de gran ayuda desde un punto de vista psicol�gico, y constituyen una excelente alternativa a la terapia farmacol�gica, a la que se acude cuando es imprescindible (Organizaci�n Panamericana de Salud, 2017).

El abordaje de la salud en la poblaci�n adulta mayor exige la adopci�n de medidas integrales enfocadas en su bienestar f�sico, mental y psicosocial. Para ello, se destaca la aplicaci�n de terapias complementarias y alternativas, cuyo prop�sito es la armonizaci�n biopsicosocial de la persona, fortaleciendo su calidad de vida personal y familiar.

En este caso, se menciona a la terapia floral como una importante opci�n. Se trata de un tipo de medicina vibracional complementaria que ayuda a restablecer el equilibrio f�sico, emocional y energ�tico a trav�s del uso de extractos diluidos de flores que contienen principios activos vibracionales, asociados a emociones y personalidades. Fue desarrollada por Edward Bach, m�dico ingl�s cuyas investigaciones y experiencias lo llevaron a comprender la relaci�n entre las emociones y las enfermedades (Healing Herbs, 2023).

Entre sus consideraciones, menciona que la enfermedad es una se�al de que existe algo que debe ser cambiado o mejorado en el propio comportamiento, enfrentando aquellas actitudes m�s escondidas, rechazadas o reprimidas del propio ser, que llevan a un conflicto entre la manifestaci�n del ego y el verdadero prop�sito de la existencia de cada persona (Silva, 2022). Este sistema terap�utico consta de 38 esencias florales, cada una relacionada a un estado mental o afectivo. El profesional que la aplica, llamado terapeuta floral, a trav�s de una profunda entrevista con el paciente y la aplicaci�n de otros medios de valoraci�n alternativa, determina aquellas esencias que se requieren en cada caso individual, preparando una diluci�n hidroalcoh�lica a partir de las seleccionadas para su administraci�n sublingual. Es un tratamiento inocuo y no farmacol�gico, cuyos efectos se perciben principalmente en el �mbito emocional del paciente (Ben�tez Rodr�guez & Ram�n N��ez, 2014) .

A pesar de su amplia aplicaci�n a nivel mundial, se cuenta actualmente con una limitada cantidad de publicaciones que avalan la efectividad de la terapia floral, y por lo tanto la mayor parte de la informaci�n proviene de fuentes emp�ricas y el reporte de experiencias de pacientes y terapeutas. Se menciona como un ejemplo la revisi�n integrativa realizada por Wanderley et al (2022), en las que se identific� evidencia cient�fica en la literatura que demuestra la eficacia de la terapia floral en s�ntomas de ansiedad y de estr�s, principalmente debida a labor de parto, sobrepeso y violencia psicol�gica (Wanderley et al., 2022).

En vista de la necesidad de contar con mejor evidencia que permita implementar el uso de esta terapia complementaria en los servicios de salud mental, se ha desarrollado la presente investigaci�n observacional para determinar el efecto de la terapia floral en pacientes adultos mayores de la unidad de funcionalidad ambulatoria del Hospital Geri�trico Dr. Bol�var Arguello P, de la ciudad de Riobamba, Ecuador.

 

Materiales y m�todos

Para la presente investigaci�n se aplic� un dise�o observacional cuantitativo exploratorio, con componentes cualitativos para valorar la experiencia subjetiva de cada paciente. La muestra estuvo constituida por 35 pacientes de ambos sexos, mayores a 65 a�os de edad, atendidos en la unidad de funcionalidad ambulatoria del Hospital Geri�trico Dr. Bol�var Arguello P, diagnosticados con trastornos de ansiedad, en los que se implement� la aplicaci�n de terapia floral como parte de su tratamiento. Los criterios de inclusi�n fueron: diagn�stico de agorafobia, fobias sociales, fobias espec�ficas, trastorno de p�nico, trastorno de ansiedad generalizada, o trastorno mixto ansioso-depresivo; y firma de consentimiento informado. Se excluyeron los pacientes con trastornos obsesivo-compulsivo, secundarios a situaciones estresantes, trastornos disociativos y somatomorfos y neurastenia. El per�odo del estudio se extendi� entre mayo y julio de 2023.

A los pacientes seleccionados para formar parte de la muestra inicialmente se les ofreci� una capacitaci�n acerca del desarrollo del estudio, seguidamente de la apertura de una historia cl�nica espec�fica para la recopilaci�n de datos y el seguimiento respectivo, aplicando la gu�a de pr�ctica cl�nica estandarizada para el manejo de pacientes con trastornos de ansiedad en atenci�n primaria, implementada en el hospital (Tabla 1).

 

Tabla 1: Entrevista semiestructurada, de la Gu�a de Pr�ctica Cl�nica para el Manejo de Pacientes con Trastornos de Ansiedad en Atenci�n Primaria

 

Para la valoraci�n del grado de ansiedad, se utiliz� la Escala de Ansiedad y Depresi�n de Goldberg (EADG) (Goldberg et al, 1988). Este instrumento consta de dos subescalas, para valoraci�n de ansiedad y depresi�n. Cada subescala tiene 9 �tems a modo de preguntas con respuestas dicot�micas. Se estructuran 4 �tems de despistaje, para determinar la probabilidad de trastorno mental, y un segundo grupo de 5 �tems que se formulan si se obtienen respuestas positivas a las preguntas de despistaje (2 o m�s para ansiedad, y m�s de 1 para depresi�n). Sin embargo, para fines investigativos, se aplica la escala completa. Se valora con un punto cada respuesta afirmativa. Se propone como punto de corte un valor igual o mayor a 4 para ansiedad, y mayor o igual a 2 para depresi�n. Este instrumento tiene una sensibilidad del 83% y una especificidad del 82%, increment�ndose la sensibilidad para la identificaci�n de trastornos en niveles m�s graves (14).

Se inici� con cada paciente el protocolo est�ndar de atenci�n y acompa�amiento psicol�gico, incluida la administraci�n de una f�rmula floral espec�fica preparada de acuerdo a las indicaciones de Edward Bach, que corresponden a 2 gotas de cada esencia floral seleccionada en 30 mL de una mezcla de brandy/glicerina alimentaria y agua (1:3). La selecci�n de las esencias se realiz� de manera individual, pero las m�s comunes a la patolog�a fueron Olive, Centaury, Elm, Larch, y Vervain.

El seguimiento se realiz� en tres grupos, uno por mes, con una cita semanal en la que se indag� acerca de los posibles efectos adversos y modificaciones del estado psicol�gico de los pacientes, y una evaluaci�n final en la que se aplic� de nuevo la escala de Goldberg para realizar una comparaci�n con los resultados basales.

Para el an�lisis estad�stico, se realiz� una prueba t para muestras relacionadas, que permite evaluar si hay una diferencia significativa entre las medias de las dos muestras emparejadas (antes y despu�s del tratamiento) y determinar si esa diferencia se debe al tratamiento o es el resultado de la variabilidad natural en los datos.

Cabe mencionar que se aplicaron las consideraciones �ticas relacionadas a un estudio de estas caracter�sticas, como aprobaci�n del hospital, aplicaci�n de consentimiento informado, confidencialidad y protecci�n de los datos.

 

Resultados

Como se observa en la tabla 2, la poblaci�n estuvo conformada principalmente por mujeres (89%) con edades comprendidas entre 75 a 79 de forma mayoritaria (37,14 %). De acuerdo a la tabla 3, el diagn�stico m�s frecuente fue trastorno de ansiedad generalizada (29,47%), seguido de trastorno debido a enfermedad (21,05 %), y trastorno de ansiedad no especificado (12,63%).

 

Tabla 2: Caracter�sticas de la poblaci�n

 

Tabla 3: Distribuci�n por diagn�stico

 

La aplicaci�n de la escala de Goldberg al inicio del tratamiento revel� que el 100% de los participantes presentaban ansiedad, que en el 51,43% de los casos se acompa�aba por depresi�n. A los 30 d�as de tratamiento, la segunda evaluaci�n evidenci� una reducci�n de 33.16% en los valores relacionados a ansiedad y 14,34% en los relacionados a depresi�n. La variaci�n individual de cada �tem puede observarse en las figuras 1 y 2.

 

Figura 1: Comparaci�n de porcentaje de respuestas afirmativas obtenidas en la escala de Goldberg, subescala ansiedad, antes y despu�s del tratamiento

Figura 2: Comparaci�n de porcentaje de respuestas afirmativas obtenidas en la escala de Goldberg, subescala depresi�n, antes y despu�s del tratamiento

 

Los resultados de la prueba t para muestras relacionadas (95% de confianza) aplicada sobre el n�mero de respuestas positivas de la escala antes y despu�s del tratamiento (tabla 4), demostraron que las medias en ambos grupos son significativamente diferentes para ansiedad (t = 10,65, p <0,05) y depresi�n (t = 3,043, p < 0,05).

 

Tabla 4: Prueba t para muestras relacionadas

 

Al aplicar un test para la evaluaci�n de la satisfacci�n, 91,43% de los participantes expresaron sentirse muy satisfechos con el tratamiento recibido y sus resultados.

 

Discusi�n

La poblaci�n de estudio est� conformada por un total de 35 participantes de ambos sexos evidenciando que el 80 % pertenecen al g�nero femenino y un 20 % por el g�nero masculino. A pesar del limitado tama�o muestra por tratarse de un estudio exploratorio, este dato est� en concordancia con las tendencias a nivel mundial, puesto que las mujeres tienen un mayor riesgo de padecer de ansiedad, y, por tanto, se espera que sean quienes m�s acudan a las actividades y programas para el cuidado de la salud mental (Pego-P�rez et al., 2018).

Los trastornos de ansiedad en sus diferentes formas tienen un gran impacto en la calidad de vida de las personas, y en el desarrollo de sus actividades cotidianas, afectando las �reas familiar, social y laboral. La relaci�n entre el estado civil y la aparici�n de ansiedad y depresi�n es evidente, ya que los adultos mayores podr�an depender f�sica y emocionalmente de su pareja. En un 34,29 % de personas que han enviudado, su estado de aflicci�n se adjudica a la p�rdida del ser querido, junto con un 8,57% de personas que han experimentado una separaci�n o divorcio. En los participantes solteros, el estado de �nimo depende en gran medida de la situaci�n de soledad. Al respecto, otros estudios han evidenciado una relaci�n significativa entre estado civil con depresi�n y ansiedad, considerando al matrimonio y la familia como un apoyo efectivo para estabilizar el estado mental y emocional del paciente (Nayak et al., 2021).

Otro par�metro que se tom� en consideraci�n en la poblaci�n fue el nivel de instrucci�n, seg�n el cual 45,72 % tiene un nivel universitario, el 25,71% nivel secundario y un 28,57% nivel primario. Este es un factor determinante en relaci�n a inequidades y accesibilidad a mejores oportunidades y condiciones de vida que permitan cubrir las necesidades econ�micas, sociales, laborales y familiares, y, por lo tanto, puede constituir una fuente de preocupaci�n y ansiedad. En otros estudios, se han encontrado asociaciones significativas entre los trastornos de ansiedad y el nivel educativo. Al parecer, una mayor educaci�n es un factor de protecci�n frente a ansiedad y depresi�n, ya que puede constituirse en motivaci�n para el �xito y el bienestar emocional (Al-Aithan et al., 2021).

La valoraci�n inicial de los participantes demostr� el resultado obvio de que exist�a la presencia de trastornos de ansiedad, puesto que este fue el motivo de consulta en el servicio. Se observa que los niveles de ansiedad presentados en los adultos mayores son altos, de acuerdo a las respuestas presentadas en los nueve �tems que corresponden a la sub escala respectiva de Goldberg. Se evidencia un elevado porcentaje en relaci�n a los signos de ansiedad que correspondieron a un 85,71% de excitabilidad, preocupaci�n 57,14%, irritabilidad 71,43%, dificultad para relajarse 74,29%, dificultad para dormir 60%, dolores de cabeza y cuello 71,43%, presencia de s�ntomas como temblores, hormigueos, mareos, sudores, diarrea 80%, preocupaci�n por la salud 54,29%, y dificultad para conciliar el sue�o o quedarse dormido 31,44%.

En relaci�n a la sub escala de depresi�n de Goldberg, los resultados demuestran una menor prevalencia de este trastorno en la poblaci�n (51,43%). Las frecuencias m�s altas para respuestas positivas corresponden a dificultad para concentrarse (45,71%), falta de confianza (42,86%), despertar temprano (37,14%), desesperanza (31,43%) y falta de apetito (31,43%).

La aplicaci�n de la terapia floral dentro de la atenci�n a los pacientes provoc� evidentes resultados positivos con respecto al puntaje en ambas escalas, tal como puede observarse en la secci�n de resultados. Esta favorable evoluci�n se evidenci� principalmente en las manifestaciones psicosom�ticas de ansiedad, depresi�n e insomnio. Las esencias florales administradas a los pacientes estuvieron acorde a la evaluaci�n diagn�stica inicial, en la que se identific� el cuadro emocional espec�fico de cada paciente.

Las esencias florales m�s utilizadas fueron: Olive y Centaury, recomendadas para incrementar la energ�a y motivaci�n, Elm para el control del estr�s y la sensaci�n de agobio, Larch para aumentar la confianza y autoestima, Clematis para contrarrestar la sensaci�n de letargo y la falta de concentraci�n, Wild Rose para disminuir la sensaci�n de apat�a y desmotivaci�n, Gentian para contrarrestar la negatividad y pesimismo, Cerato para evitar la falta de decisi�n, Gorse para eliminar la sensaci�n de desesperanza, Star of Bethlehem para regular los efectos de shocks o traumas emocionales, y Honeysuckle para casos de nostalgia, entre otras. Estas son las indicaciones cl�sicas de las esencias florales tal como se usan en la pr�ctica terap�utica, y de acuerdo a las recomendaciones del Dr. Edward Bach.

El an�lisis estad�stico demostr� que la introducci�n de la terapia floral en el tratamiento provoc� una diferencia significativa en la valoraci�n de las manifestaciones de la ansiedad y la depresi�n, y, por tanto, result� efectiva en las condiciones aplicadas a la mencionada poblaci�n.

Como se ha mencionado anteriormente, son escasos los estudios publicados sobre la evaluaci�n de la efectividad de la terapia floral, y la mayor�a de informaci�n emp�rica proviene de los propios practicantes de la terapia dentro de condiciones de atenci�n habituales. Sin embargo, de entre los pocos art�culos con los que se cuentan, se pueden extraer interesantes conclusiones. El estudio realizado por Batistella et al (2021) en 62 estudiantes de fisioterapia para evaluar el efecto de la terapia floral en la ansiedad, us� el sistema floral Minas frente a placebo y control. A trav�s del inventario de ansiedad STAI-T, se determin� una reducci�n significativa en el grupo que utiliz� la terapia, con mejor respuesta que el placebo (Batistella et al., 2021).

Un estudio similar realizado en estudiantes de enfermer�a por Domingues et al (2022) sobre el control de estr�s, ansiedad y depresi�n, evidenciaron una reducci�n de 67%, 52% y 46% de cada uno de estos par�metros respectivamente (Domingues et al., 2022).� El estudio cuasiexperimental efectuado en un centro obst�trico por Pitilin et al (2022) evalu� el efecto de las Flores de Bach en el trabajo de parto, espec�ficamente en dolor, ansiedad y estr�s, frente a placebo. Los par�metros analizados como dilataci�n cervical, contracciones uterinas, oxitocina, cortisol y duraci�n de labor de parto, mostraron diferencias significativas entre el tratamiento y el placebo (Pitilin et al., 2022).

A pesar de estas y otras evidencias, existen en el �mbito cient�fico posiciones en contra de la efectividad de la terapia floral para los trastornos presentados, y otros de naturaleza diversa, principalmente debido al desconocimiento de su mecanismo de acci�n, que no corresponde al efecto farmacol�gico cl�sico, y que ha requerido el uso de hip�tesis que tratan de interpretar la trasmisi�n energ�tica desde la flor hasta el veh�culo y finalmente el paciente. Villareal-Zegarra (2019) propone una reflexi�n sobre el uso de la terapia floral, que, formando parte de un sistema de salud, podr�a poner en riesgo la econom�a de los pacientes, el uso inadecuado de los recursos de salud, y el posible da�o a los pacientes, al dejar de administrar una terapia de eficacia m�s reconocida. Afirma que la falta de calidad en los ensayos cl�nicos que usan terapia floral, el ignorar los sesgos que est�n involucrados en los estudios de trastornos del �nimo, y la similitud de la terapia con los resultados de placebo que se concluyen en muchos estudios, pone en tela de duda su efectividad y utilidad global (Villarreal-Zegarra & Taype-Roldan, 2019) .

Haciendo una comparaci�n con los dem�s estudios mencionados, se evidencia una falta de conocimiento sobre la aplicaci�n y limitaciones de esta terapia, que, en la mayor�a de casos, se usa de modo racional como complementaria a otros tratamientos que por s� solos no lograban cumplir con los objetivos terap�uticos, sin mencionar que, como tratamiento completo, su costo-utilidad es m�s favorable. Ciertamente, existe una carencia de ensayos completos que produzcan evidencias m�s s�lidas, junto al inter�s de realizarlas.

Como cualquier tipo de tratamiento terap�utico, es necesario realizar m�s investigaci�n sin desechar a priori los resultados ya obtenidos, y poner m�s �nfasis en el desarrollo de estudios basados en resultados de salud m�s pragm�ticos, que permitan conocer la experiencia real del paciente, no solamente en su sentido biol�gico.

 

Conclusiones

La terapia floral de Bach mostr� ser efectiva dentro del plan de apoyo emocional aplicado a los pacientes adultos mayores de la unidad de funcionalidad ambulatoria del Hospital Geri�trico Dr. Bol�var Arguello P., en el control de ansiedad y depresi�n. Se evidenciaron diferencias estad�sticamente significativas en las respuestas a la escala de Goldberg antes y despu�s del tratamiento, con una alta satisfacci�n de los participantes.

Al ser un estudio exploratorio, se requiere de posteriores ensayos utilizando tama�os muestrales m�s grandes, y comparaciones frente a otros tratamientos, para obtener un cuadro general que avale la efectividad de la terapia, de modo que pueda incluirse oficialmente dentro de los protocolos de atenci�n psicol�gica en el sistema de salud ecuatoriano.

 

Referencias

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