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Proteinuria, Microalbuminuria y su relaci�n con consumo de suplementos proteicos en deportistas mayores de 18 a�os de la ciudad de Milagro

 

Proteinuria, Microalbuminuria and its relationship with consumption of protein supplements in athletes over 18 years of age from the city of Milagro

 

Protein�ria, Microalbumin�ria e a sua rela��o com o consumo de suplementos proteicos em atletas maiores de 18 anos da cidade de Milagro

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: hmoralesm@unemi.edu.ec

 

 

Ciencias de la Salud

Art�culo de Investigaci�n

 

 

* Recibido: 01 de agosto de 2024 *Aceptado: 30 de septiembre de 2024 * Publicado: �29 de octubre de 2024

 

        I.            Universidad Estatal de Milagro, Ecuador.

 

 

Resumen

La presente investigaci�n tiene como prop�sito examinar la relaci�n entre la proteinuria y la microalbuminuria con el consumo de suplementos proteicos en deportistas mayores de 18 a�os en la ciudad de Milagro. Se llev� a cabo un estudio que incluy� a un grupo de atletas con el objetivo de evaluar la presencia de estos marcadores de da�o, as� como el tipo y cantidad de suplementos proteicos que consumen.

Se analiza la importancia de la proteinuria y microalbuminuria como indicadores de salud, especialmente en poblaciones que pueden estar expuestas a una ingesta elevada de prote�nas a trav�s de suplementos. Se detallan los m�todos utilizados para la recolecci�n de datos, incluyendo an�lisis de orina y cuestionarios sobre h�bitos alimenticios y de suplementaci�n.

Los resultados sugieren una relaci�n entre el alto consumo de suplementos proteicos y la presencia de proteinuria y microalbuminuria en algunos deportistas. Sin embargo, se discuten tambi�n otros factores que pueden influir en estos resultados, como la hidrataci�n, la intensidad del entrenamiento y las caracter�sticas individuales de cada atleta.

Para el cumplimiento de los objetivos planteados para resoluci�n de la problem�tica se aplic� un estudio de tipo transversal observacional en el que se analizaran un total de 49 muestras de orina procedentes de 49 deportistas.

Palabras Claves: Proteinuria; Microalbuminuria; Consumo de suplementos proteicos.

 

Abstract

The purpose of this research is to examine the relationship between proteinuria and microalbuminuria with the consumption of protein supplements in athletes over 18 years of age in the city of Milagro. A study was carried out that included a group of athletes with the aim of evaluating the presence of these markers of damage, as well as the type and amount of protein supplements they consume.

The importance of proteinuria and microalbuminuria as health indicators is analyzed, especially in populations that may be exposed to a high intake of protein through supplements. The methods used for data collection are detailed, including urine analysis and questionnaires on dietary and supplementation habits.

The results suggest a relationship between high consumption of protein supplements and the presence of proteinuria and microalbuminuria in some athletes. However, other factors that may influence these results are also discussed, such as hydration, training intensity and the individual characteristics of each athlete.

To achieve the objectives set for solving the problem, a cross-sectional observational study was applied in which a total of 49 urine samples from 49 athletes were analyzed

Keywords: Proteinuria; Microalbuminuria; Consumption of protein supplements.

 

Resumo

O objetivo desta investiga��o � examinar a rela��o entre a protein�ria e a microalbumin�ria com o consumo de suplementos proteicos em atletas com mais de 18 anos na cidade de Milagro. Foi realizado um estudo que incluiu um grupo de atletas com o objetivo de avaliar a presen�a destes marcadores de dano, bem como o tipo e quantidade de suplementos proteicos que consomem.

� analisada a import�ncia da protein�ria e da microalbumin�ria como indicadores de sa�de, principalmente em popula��es que possam estar expostas a uma elevada ingest�o de prote�nas atrav�s de suplementos. Os m�todos utilizados para a recolha de dados s�o detalhados, incluindo a an�lise de urina e question�rios sobre h�bitos alimentares e de suplementa��o.

Os resultados sugerem uma rela��o entre o elevado consumo de suplementos proteicos e a presen�a de protein�ria e microalbumin�ria em alguns atletas. No entanto, s�o tamb�m discutidos outros fatores que podem influenciar estes resultados, como a hidrata��o, a intensidade do treino e as caracter�sticas individuais de cada atleta.

Para cumprir os objetivos tra�ados para a resolu��o do problema, foi aplicado um estudo observacional transversal no qual foram analisadas um total de 49 amostras de urina de 49 atletas.

Palavras-chave: Protein�ria; Microalbumin�ria; Consumo de suplementos proteicos.

 

Introducci�n

En la prehistoria, la belleza se asociaba a la reproducci�n de la especie, mientras que, en la actualidad, se asocia al �xito personal, profesional y social. El estereotipo de belleza femenino de las sociedades contempor�neas se basa en la extrema delgadez y el masculino en cuerpos musculados. (Mu�oz, 2014) al pasar los a�os esta idea ha ido ganando pensamientos en la sociedad, tanto as� que se ha convertido en un papel muy importante para la superaci�n profesional.

La imagen corporal (IC) representa la forma en la que un individuo se percibe, imagina, siente y act�a respecto a su propio cuerpo. Es un concepto din�mico que puede modificarse a lo largo de la vida. La percepci�n de nuestro propio cuerpo est� influida por factores socioculturales. Desde el punto de vista hist�rico, el concepto de belleza se ha modificado sustancialmente.(MU�OZ, 2014)

Desde nuestros antepasados, el modelo del hombre fuerte y musculoso fue establecido como el ideal para la sociedad. As�, los grandes guerreros reflejaban valent�a, fuerza, poder, respeto y seguridad. Hoy en d�a este modelo est�tico es difundido por los medios de comunicaci�n y se ha establecido en la sociedad como el ideal para el g�nero masculino. Por lo antes mencionado los varones est�n sufriendo una elevada presi�n social, principalmente por los medios de comunicaci�n, para mantener una figura corporal musculosa, y que el incremento de la pr�ctica deportiva en gimnasios y el consumo de esteroides anabolizantes, se considera una respuesta social a dicha presi�n como lo dice (Er�ndira et al., 2011)

En la actualidad el aspecto f�sico es una de las caracter�sticas m�s importantes entre los seres humanos, siendo en muchas ocasiones el aspecto f�sico el que da la oportunidad de encontrar un trabajo o tener un estilo de vida mejor entre la sociedad� es lo que indica seg�n� una encuesta realizada en Gallup en Brasil, citada por una nota del diario colombiano El Tiempo en 2003 se�alaba que para el 61% de las personas en ese pa�s, el factor m�s importante para el �xito social era verse bien f�sicamente.

Es por ese pensamiento que muchas mujeres optan por entrar a procedimientos de cirug�as o en consumir un sin n�mero de productos qu�micos que ayuden a su apariencia f�sica y en otras ocasiones a realizar actividad deportiva y la ingesti�n de sustancia� que ayuden a su� metabolismo a desarrollar mayor masa muscular, en muchas ocasiones este consumo de sustancia qu�micas es sin recomendaci�n de profesionales de la salud sino� solo de car�cter emp�ricos, entre estos producto de mayor consumo se encuentra las hormonas, las prote�nas, los amino�cidos.� Los consumos de estas sustancias qu�micas son beneficiosos para el organismo, pero si se excede de su consumo pueden producir da�os a la salud en el aspecto bioqu�mico como es el caso del consumo excesivo de prote�nas, seg�n (Martinez & Marti�ez, 2006) las prote�nas son el principal componente estructural y funcional de las c�lulas y tienen numerosas e importantes funciones dentro del organismo que van desde su papel catal�tico (enzimas) hasta su funci�n en la motilidad corporal (actina, miosina), pasando por su papel mec�nico (elastina, col�geno), de transporte y almac�n (hemoglobina, mioglobina, citocromos), protecci�n (anticuerpos), reguladora (hormonas), etc.

Est� claro que las prote�nas son esenciales en la alimentaci�n del ser humano pero esta tiene sus niveles de consumo nutricional de prote�nas como lo indica (Martinez & Marti�ez, 2006)� que se han establecido para la poblaci�n americana y canadiense, extrapolable a la poblaci�n espa�ola en 0,8 g/kg/d�a para adultos, con valores ligeramente superiores para la infancia (1,5 g/kg/d�a para < 1 a�o), ni�ez (1,1 g/kg/d�a, 1-3 a�os), escolares-pubertad (0,95 g/kg/d�a, 4-13 a�os) y adolescencia (0,85 g/kg/d�a, 14-18 a�os) y mujeres gestantes y lactantes (1,1 g/kg/d�a). Respecto al porcentaje cal�rico a cubrir por la prote�na, compatible con un estado adecuado de salud, para la poblaci�n adulta se ha establecido en 10-35% de las kilocalor�as totales.

No obstante, existen personas que al no ver resultados inmediatos de acci�n de las prote�nas en su aspecto f�sicos ingieren cantidades no recomendables provocando un sin n�mero de efectos secundarios a nivel bioqu�mico, los cuales pueden afectar a la salud a medida que pase el tiempo, uno de los tejidos u �rganos m�s afectados es el sistema �seo seg�n lo indica� (Nebot et al., 2010) el catabolismo de las prote�nas genera amonio y libera sulfatos contenidos en los amino�cidos. El citrato y el carbonato c�lcico del hueso son movilizados para neutralizar dichos �cidos, de ah� que, te�ricamente, cuando aumentan las ingestas proteicas disminuya la densidad mineral �sea, como consecuencia de la liberaci�n de su principal mineral constituyente: el calcio y la concentraci�n urinaria de calcio se incremente con la consecuencia, ya mencionada en el apartado renal, del incremento del riesgo de formaci�n de c�lculos renales de oxalato c�lcico.

Bajo condiciones normales las prote�nas de alto peso molecular (PM) del plasma (por ejemplo la IgG) no pasan a trav�s de la membrana de filtraci�n glomerular debido a efectos de tama�o y de carga. De las prote�nas de PM intermedio, como la alb�mina (69 KDa) y la transferrina, se filtra solamente una peque�a fracci�n. Las prote�nas de PM < 30 KDa (por ejemplo la β2-microglobulina, la lisozima y la α1-microglobulina), pueden pasar libremente a trav�s de la membrana de filtraci�n y posteriormente son reabsorbidas casi en su totalidad (95%) a nivel de los t�bulos. El contenido proteico urinario en una persona saludable es por consiguiente bajo (solo 30-130 mg/d�a), consistiendo principalmente de alb�mina (40%), fragmentos de inmunoglobulina (15%), otras prote�nas plasm�ticas (5%) y prote�nas tisulares del sistema urinario (40%)(Carbajal, 2017).

Seg�n (Rend�n, 2018) el metabolismo de prote�nas provenientes de la dieta da como resultado urea, la cual es el principal producto de desecho metab�lico de �stas. El ri��n filtra la sangre en las nefronas para poder excretar la urea, pues la concentraci�n elevada de �sta en sangre es t�xica. Cuando se consumen dietas altas en prote�nas, la urea en sangre aumenta debido a que se metaboliza una mayor cantidad de prote�na a lo habitual y por lo tanto debe de excretarse mayor cantidad de urea, generando as� una sobrecarga renal. Produciendo incrementos en la presi�n glomerular y provocando hiperfiltraci�n, siendo este proceso te�ricamente la raz�n de la p�rdida de la funci�n renal a largo plazo, teor�a que no ha podido confirmarse, pero tampoco refutarse hasta la fecha.

Si bien hasta la actualidad datos concretos sobre los niveles limites superiores reales del consumo de prote�nas no existe, ni los efectos da�inos que puede su aporte excesivo sobre la salud, el �nico aspecto en donde la mayor�a de los investigadores est�n de acuerdo es que, si su consumo excesivo conlleva a un d�ficit en el aporte de grasas o carbohidratos, esto no s�lo puede acarrear problemas de rendimiento sino tambi�n sobre la salud, debido a esto, cualquier incremento en el aporte de prote�nas siempre debe ser realizado manteniendo un equilibrio con relaci�n a los otros macronutrientes seg�n indica (Naclerio, 2006)

Te�ricamente y seg�n estudios realizados en un grupo de personas que asiste a un gimnasio y consumen un exceso de los suplementos proteicos aumenta el riesgo de deshidrataci�n si no se consume la cantidad adecuada de l�quidos porque se necesitan 50 ml de agua para excretar un gramo de urea. El consumo excesivo de prote�nas puede catalizar procesos de desanimaci�n y transaminaci�n y la transformaci�n de residuos hidrocarbonados en grasa, ya que no hay reservas de amino�cidos en el cuerpo. Adem�s, la alta tasa de ingesta de prote�nas por parte de los participantes podr�a indicar un consumo inapropiado y peligroso(S�nchez Oliver et al., 2011)

Las personas normalmente sanas eliminan en la orina cantidades de prote�nas menores a 100 mg al d�a, de las cu�les un 40% es alb�mina, un 20% globulinas de bajo peso molecular, y el 40% restante otras prote�nas de origen tubular y del tracto urinario. La proteinuria se define como la presencia de prote�nas en la orina superior a 150mg en 24 horas en adultos, y la albuminuria se define como la presencia de alb�mina en una cantidad mayor a 30mg al d�a en adultos; ambas medidas se han utilizado por parte de los nefr�logos como marcadores importantes de riesgo precoz de progresi�n o aparici�n de lesi�n renal, adem�s, en los �ltimos a�os se ha demostrado que algunas enfermedades como la hipertensi�n arterial y la diabetes mellitus tambi�n producen proteinuria debido a su efecto sobre los ri�ones. (D�az Garc�a et al., 2015)

Teniendo como objetivo principal para la resoluci�n de la problem�tica en la actualidad el evaluar la incidencia del consumo de suplementos proteicos en el porcentaje de proteinuria y micro albumina,� analizados en muestras biol�gicas de orina, en deportistas mayores de 18 a�os que asisten a gimnasios de la ciudad de Milagro, por medio de la identificaci�n del porcentaje de consumo de suplementos nutricionales en general en deportistas de la ciudad de milagro,� identificando las caracter�sticas sociodemogr�ficas de las personas que asisten al gimnasio, valorando los niveles de prote�nas y micro albuminuria en orina, valorando la ingesta total promedio de prote�nas en la dieta y en suplementos, relacionando con los niveles de prote�nas, micro albuminuria y la ingesta total de prote�nas.

 

Materiales y m�todos

La metodolog�a implementada en esta investigaci�n corresponde al m�todo cient�fico. Se utilizaron un conjunto de t�cnicas, par�metros y procedimientos que orientan a la investigaci�n con la finalidad de poder alcanzar un conocimiento objetivo de la relaci�n entre Proteinuria, Microalbuminuria y su relaci�n con el consumo de suplementos proteicos en deportistas mayores de 18 a�os de la ciudad de Milagro, demostrado y comprobado racionalmente.

Nuestro universo o poblaci�n de estudio corresponde a los usuarios del gimnasio NOVAFIT ubicado en la ciudad de Milagro, en la provincia del Guayas-Ecuador. Ha sido elegido este gimnasio por la alta demanda de usuarios hombres y mujeres de distintas edades que asisten a realizar ejercicios diariamente, adem�s por la infraestructura, la apertura y los permisos otorgados por los responsables o encargados del funcionamiento de este establecimiento.

Este gimnasio cuenta con una jornada de la ma�ana, tarde y noche, asisten un total de 100 personas diarias aproximadamente, existiendo d�as de mayor concurrencia y otros de menor, del total de personas que asisten diariamente se ha tomado un total de 49 personas, las cuales realizan ejercicios de fuerzas.

 

 

 

 

Resultados y discusi�n

An�lisis de resultados

Para demostraci�n de resultados se realiza los an�lisis estad�sticos y comparaci�n de variables que correlacionan para demostraci�n de la hip�tesis esperada.

Resultados de an�lisis interrelaci�n:

Edad /Proteinuria Cualitativa

 

Figura 4. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria (prueba cualitativa) en personas por grupo de edad.

 

Cuadro 1. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n entre variables edad / proteinuria cualitativa

 

Cuadro 2. C�lculo de Chi cuadrado de relaci�n de variable proteinuria cualitativa vs edad.

 

Podemos evidenciar que del total de personas en la muestra que comprende el estudio el 53,1 % presenta proteinuria en prueba cualitativa (tirilla reactiva), y que el mayor porcentaje de este resultado lo comprende el grupo de rango de edad de 18 a 29 a�os, los cuales que son aquellos en su mayor�a no tienen precauci�n en efectos secundarios a la salud, se observa que la relaci�n entre las variables edad y proteinuria es nula debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es mayor 0.05, que demuestran que no existe relaci�n.

Edad /Proteinuria cuantitativa

 

Figura 5. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria cuantitativa en personas por grupo de edad.

 

Cuadro 3. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs edad

 

Cuadro 4. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable proteinuria vs edad.

 

Se evidencia que el 65,3% del total de personas en estudio presentan proteinuria en rangos superiores a lo normal, lo que puede acarrear a posibles enfermedades renales a futuro, entre variables se evidencia que al ser el Chi cuadrado mayor a 0,05 no existe una relaci�n, es decir que la variable edad no influye directamente sobre si puedan o no presentar proteinuria en examen cuantitativo.

 

 

Edad /Microalbuminuria cuantitativa

 

Figura 6. Barras de verificaci�n de presencia de microalbuminuria cuantitativa en personas por grupo de edad.

 

Cuadro 5. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variable microalbuminuria cualitativa vs edad

 

 

 

Cuadro 6. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable microalbuminuria cuantitativa vs edad.

 

Podemos evidenciar que del total de personas (49), en la muestra que comprende el estudio, el 62,5 % de un rango de edad de 18 -29 a�os presenta una microalbumina en prueba cuantitativa en rango superiores a los normales, lo cual indica posible da�o renal a futuro. Adicional se observa que la relaci�n entre las variables edad y la microalbuminuria cuantitativa es nula debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es mayor 0.05, que demuestran que no existe relaci�n, interpret�ndose que la variable edad no influye para que presenten un problema renal futuro.

Sexo / proteinuria cualitativa

 

Figura 7. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria cualitativa en personas por grupo de sexo.

 

Cuadro 7. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variable proteinuria vs sexo

 

Cuadro 8. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable proteinuria cualitativa vs sexo.

 

Podemos evidenciar que del total de personas en la muestra que comprende el estudio, el 46,2% del grupo sexo masculino presenta una proteinuria en prueba cualitativa, mientras que el 53,8% del grupo femenino tiene �presencia de proteinuria en prueba cualitativa (tirillas reactivas), verificando que el sexo femenino tiene mayor cantidad de personas con posibles da�os renales que en el sexo masculino, lo que se puede dar hip�tesis que el sexo femenino tiene una menor absorci�n de la prote�na en su ingesta diaria, lo cual podr�a ser analizado en otro estudio. Esto indica que las variables sexo y la proteinuria cualitativa es correlacional debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es menor 0.05, que demuestran que existe una relaci�n entre el sexo y las variables de presencia � ausencia de proteinuria cualitativa.

Sexo / proteinuria cuantitativa

 

Figura 8. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria cuantitativa en personas por grupo de sexo.

 

Cuadro 9. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs sexo

 

Cuadro 10. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs sexo.

 

Podemos evidenciar que del total de personas en la muestra que comprende el estudio, el 46,9 % del grupo sexo masculino presenta una proteinuria en prueba cuantitativa y el 53,1% del grupo de sexo femenino tiene presencia de proteinuria cuantitativa. Del total de personas en el estudio un 65,3% presentan proteinuria y 34,7% tienen ausencia. Esto confirma que el sexo femenino tiene una absorci�n menor que el sexo masculino, por lo cual los posibles problemas renales a futuros se ver�n reflejados en mayores casos en mujer que hombre. Esto confirma la relaci�n entre las variables sexo y la proteinuria cuantitativa es correlacional debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es menor 0.05.

 

 

 

 

 

 

 

Sexo / microalbuminuria cuantitativa

 

Figura 9. Barras de verificaci�n de presencia de microalbuminuria cuantitativa en personas por grupo de sexo.

 

Cuadro 11. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs sexo

 

Cuadro 12. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs sexo

 

Se observa que la relaci�n entre las variables sexo y la microalbuminuria cuantitativa es correlacional debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es menor 0.05, que demuestran que existe una relaci�n entre el sexo y las variables de presencia � ausencia de microalbuminuria cuantitativa.

Tiempo diario que dedica a realizar actividad f�sica o asiste al gimnasio / proteinuria cuantitativa

Figura 11. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria cuantitativa vs Tiempo diario dedica a realizar actividad f�sica o asiste al gimnasio

 

Cuadro 15. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs Tiempo diario dedica a realizar actividad f�sica o asiste al gimnasio.

 

 

Cuadro 16. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable proteinuria cuantitativa vs Tiempo diario dedica a realizar actividad f�sica o asiste al gimnasio

 

Podemos evidenciar que del total de personas en la muestra que comprende el estudio, el 73,5 % del grupo que realiza ejercicios entre dos y tres horas diarias, de los cuales el 51,0% presenta una proteinuria en prueba cuantitativa en rangos con posibles problemas renales, mientras que el grupo que dedica entre 4 y 5 horas comprende el 26,5%, del cual 14,3% presenta proteinuria en prueba cuantitativa, que demuestra posibles problemas renales, podemos indicar que� la relaci�n entre las variables proteinuria cuantitativa vs Tiempo diario dedica a realizar actividad f�sica o asiste al gimnasio, no existe� debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es mayor 0.05, que demuestran que la cantidad de horas realizando ejercicio no asegura una mayor absorci�n de prote�nas, pues el organismo tiene un porcentaje de absorci�n diaria.

Tipo de prote�na que consume/Prote�na

Figura 16. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria cualitativa y su relaci�n con el tipo de prote�na que consume.

 

Cuadro 25. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variables tipo de prote�na que consume/Proteinuria cualitativa

 

 

 

Cuadro 26. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable tipo de prote�na que consume /Prote�nuria cualitativa

 

Se verifica que del 100% de las personas en estudio el 53,1% presento proteinuria en prueba reactiva con tirilla mientras� que el 46,9% obtuvo ausencia, aunque existieron diferentes grupo de consumo de distinto tipos de prote�nas el grupo que consume prote�na de soja es con un 24, 5%� obtuvieron mayor porcentaje de presencia, se demuestra que este tipo de prote�na aun al no ser un suplemento consumida sin control o conocimiento puede provocar da�os futuros renales. Se observa que la relaci�n entre las variables no existe basada a que el resultado de Chi cuadrado de Person es mayor 0.05, que demuestran que no existe una relaci�n entre variables.

Tipo de prote�na que consume / Prote�na mg/dl ���

 

Figura 17. Barras de verificaci�n de presencia de proteinuria cuantitativa y su relaci�n con el tipo de prote�na que consume.

 

Cuadro 27. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variables tipo de prote�na que consume/Proteinuria cuantitativa.

			PROTEINA mg/dl		Total
			NORMAL	PROBLEMA RENAL
TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	SUERO LACTEO	Count	5	4	9
		Expected Count	3,1	5,9	9,0
		% within TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	55,6%	44,4%	100,0%
		% within PROTEINA mg/dl	29,4%	12,5%	18,4%
		% of Total	10,2%	8,2%	18,4%
	PROTEINA CASEINA	Count	7	5	12
		Expected Count	4,2	7,8	12,0
		% within TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	58,3%	41,7%	100,0%
		% within PROTEINA mg/dl	41,2%	15,6%	24,5%
		% of Total	14,3%	10,2%	24,5%
	PROTEINA SOJA	Count	4	17	21
		Expected Count	7,3	13,7	21,0
		% within TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	19,0%	81,0%	100,0%
		% within PROTEINA mg/dl	23,5%	53,1%	42,9%
		% of Total	8,2%	34,7%	42,9%
	PROTEINA CARNE	Count	1	6	7
		Expected Count	2,4	4,6	7,0
		% within TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	14,3%	85,7%	100,0%
		% within PROTEINA mg/dl	5,9%	18,8%	14,3%
		% of Total	2,0%	12,2%	14,3%
Total		Count	17	32	49
		Expected Count	17,0	32,0	49,0
		% within TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	34,7%	65,3%	100,0%
		% within PROTEINA mg/dl	100,0%	100,0%	100,0%
		% of Total	34,7%	65,3%	100,0%

 

Cuadro 28. Calculo de Chi cuadrado de prueba de relaci�n de variable tipo de prote�na que consume /Prote�nuria cuantitativa

 

Se verifica que del 100% de las personas en estudio el 53,1% presento proteinuria en rangos fuera de lo normal mientras que el 46,9% obtuvo rangos normales, aunque existieron diferentes grupos de consumo de distintos tipos de prote�nas el grupo que consume prote�na de soja es con un 24, 5% obtuvieron mayor porcentaje de rangos anormales, se demuestra que este tipo de prote�na aun al no ser un suplemento consumida sin control o conocimiento puede provocar da�os futuros renales. Se observa que existe relaci�n entre variables, basada a que el resultado de Chi cuadrado de Person es menor a 0.05, que demuestran que existe una relaci�n entre variables, que se deduce que a mayor consumo de cualquier tipo de prote�na en valores no recomendados puede provocar da�os futuros.

Tipo de prote�na que consume * Microalbuminuria mg/L

 

Figura 18. Barras de verificaci�n de presencia de microalbuminuria cuantitativa y su relaci�n con el tipo de prote�na que consume

Cuadro 29. Distribuci�n de porcentajes de relaci�n de variables tipo de prote�na que consume/Microalbuminuria cuantitativa.

			MICROALBUMINURIA mg/L		Total
			NORMAL	PROBLEMA RENAL
TIPO DE PROTEINA QUE CONSUME	SUERO LACTEO	Count	5	4	9
		Expected Count	3,5	5,5	9,0
		% within tipo de proteina que consume	55,6%	44,4%	100,0%
		% within MICROALBUMINURIA mg/L	26,3%	13,3%	18,4%
		% of Total	10,2%	8,2%	18,4%
	PROTEINA CASEINA	Count	7	5	12
		Expected Count	4,7	7,3	12,0
		% within tipo de proteina que consume	58,3%	41,7%	100,0%
		% within MICROALBUMINURIA mg/L	36,8%	16,7%	24,5%
		% of Total	14,3%	10,2%	24,5%
	PROTEINA SOJA	Count	6	15	21
		Expected Count	8,1	12,9	21,0
		% within tipo de proteina que consume	28,6%	71,4%	100,0%
		% within MICROALBUMINURIA mg/L	31,6%	50,0%	42,9%
		% of Total	12,2%	30,6%	42,9%
	PROTEINA CARNE	Count	1	6	7
		Expected Count	2,7	4,3	7,0
		% within tipo de proteina que consume	14,3%	85,7%	100,0%
		% within MICROALBUMINURIA mg/L	5,3%	20,0%	14,3%
		% of Total	2,0%	12,2%	14,3%
Total		Count	19	30	49
		Expected Count	19,0	30,0	49,0
		% within tipo de proteina que consume	38,8%	61,2%	100,0%
		% within MICROALBUMINURIA mg/L	100,0%	100,0%	100,0%
		% of Total	38,8%	61,2%	100,0%

 

Conclusiones

El presente estudio tuvo como objetivo general analizar niveles bioqu�micos de prote�nas y su relaci�n con el consumo de suplementos proteicos en personas mayores de 18 a�os que practican fisicoculturismo en el gimnasio NOVAFIT de la ciudad de Milagro, el cual se realiz� a trav�s del an�lisis de par�metros bioqu�micos como prote�nas en orina, por medio de dos m�todos, tirilla reactiva y de an�lisis colorim�trico en laboratorio, relacionado a diferentes variables que influyen en el estudio, como conclusiones de relaci�n se obtuvo los siguiente:

�         Concluimos que existe variables en este estudio que no tienen relaci�n alguna, aunque existieron personas que obtuvieron valores alto en los an�lisis bioqu�micos cuantitativos, como son la edad, cantidad de horas dedicadas al ejercicio, mantener dieta h�per proteica, los distintos tipos de prote�nas aseguran niveles altos o normales, pues depende mucho de cada persona y su nivel de absorci�n.

�         Podemos evidenciar que del total de personas en la muestra que comprende el estudio, el 46,2% del grupo sexo masculino, el 53,8% del grupo femenino presenta una proteinuria en prueba cualitativa, se observ� que la relaci�n entre las variables sexo y las variables proteinuria y microalbuminuria es correlacional debido a que el resultado de Chi cuadrado de Person es menor 0.05, que demuestran que existe una relaci�n entre el sexo y las variables de presencia � ausencia de valores superiores de estos par�metros, se puede indicar que el sexo femenino tiene mayor cantidad de personas con posibles da�os renales que en el sexo masculino, lo que se puede dar hip�tesis que el sexo femenino tiene una menor absorci�n de la prote�na en su ingesta diaria, lo cual podr�a ser analizado en otro estudio.

�         Se verifica que el 57,1% corresponde al grupo de personas que toman suplementos proteicos, de los cuales el 30,6%, obtuvieron rangos superiores en prueba proteinuria cuantitativa y microalbuminuria a los normales, indicando posibles da�os renales. Esto comprueba que el consumo de suplemento si trae consigo proteinuria en pacientes, aunque la relaci�n de las variables no exista porque existieron personas que obtuvieron rangos anormales superiores a 10 mg/dL(prote�na) y 30mg/L (microalbuminuria), aunque no consum�an suplementos, esto se debe a que no solo existe prote�nas en suplemento sino tambi�n en alimentos diferentes, que podr�a ser parte de un nuevo estudio.

�         Se verifico que entre todas las variables la relaci�n o influencia de la variable porcentaje de adecuaci�n proteica diaria, es la m�s importante debido a que en ella se considera el consumo diario de suplementos en gramos, los gramos de prote�na en alimentos, dando como resultado y para comprobaci�n de nuestra hip�tesis que el 63,3% del total de personas en estudio present� valores superiores a los normales de proteinuria y microalbuminuria 10 mg/dL(prote�na) y 30mg/L (microalbuminuria), que categorizaron a nuestras personas en estudio en grupo de necesidad y otros en exceso, lo cual puede causar da�os a la salud renal si no existe un control. De esta forma se cumple con el an�lisis de niveles bioqu�micos de proteinuria, microalbuminuria y su relaci�n con el consumo de suplementos.

 

Recomendaciones

En base a los resultados recogidos en la presente investigaci�n, y el aporte bibliogr�fico se recomienda

�         Extender este tipo de estudios en otros gimnasios de la ciudad de Milagro, o en otras provincias para verificar si los resultados obtenidos son comparables.

�         Amplificar la investigaci�n utilizando par�metros que los futuros investigadores crean pertinentes.

�         Concientizar a las personas que asisten a gimnasios sobre el consumo de suplementos, para cuidar la salud y evitar futuras enfermedades renales dentro de la ciudad.

�         Actuar sobre las personas que han obtenido resultados fuera de la normalidad para evitar m�s da�o renal.

 

Referencias

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